lo más leído

Evelyn Matthei y el ocaso de una candidatura que no cuaja

Teresa Frías K.

Evelyn Matthei ya no lidera: su candidatura se estanca, pierde terreno y enfrenta un riesgo de volver irrelevante.

Lo de Evelyn Matthei no era solo favoritismo, era una certeza hace unos meses. Con buena evaluación como alcaldesa, experiencia de gobierno y una imagen de mujer directa, aparecía como la figura más sólida del sector. Pero la política chilena tiene poco de lógica lineal y mucho de pulsión emocional. Hoy, Matthei no despega. Y lo peor: se estanca.

Lea También: Matthei asegura que no eliminará el Ministerio de la Mujer

La última encuesta Cadem no deja espacio para el matiz: Matthei quedó en tercer lugar, empatada con Franco Parisi, un candidato virtual, sin estructura política ni presencia real en terreno. Es un dato que, por sí solo, debiera provocar alarma en su equipo. Pero más allá de la fotografía, el problema es la tendencia: hace meses que Matthei no sube. Y en política, estancarse es empezar a caer.

¿Qué pasó? Varias cosas al mismo tiempo. Primero, corrió sola durante demasiado tiempo, confiada en que su sola presencia bastaba. Mientras tanto, José Antonio Kast organizaba, Jeannette Jara tejía alianzas y Franco Parisi cultivaba su nicho digital. Segundo, los constantes cambios en su comando han sido más síntoma que solución: no hay un relato claro, ni propuesta distintiva. Y tercero, y tal vez lo más delicado: su desconexión creciente con la realidad del Chile post-2020.

La Evelyn Matthei que logró popularidad por su estilo directo, hoy se percibe más como una figura severa, anclada en un Chile que ya no existe. Sus discursos resuenan más con los convencidos que con los nuevos votantes. Su liderazgo, en vez de renovarse, se ha ido encapsulando.

Mientras tanto, Kast consolida su electorado más duro, Jara representa un proyecto en ascenso y Parisi —por insólito que parezca— se cuela como outsider competitivo. Y Matthei, en cambio, parece atrapada entre la nostalgia del pasado y la falta de audacia para reinventarse.

¿Puede repuntar? Sí, pero no con más de lo mismo. Necesita un golpe de timón real: recuperar sintonía con la ciudadanía, ordenar su equipo y salir del personaje. El electorado ya no busca políticos con experiencia; busca políticos que entiendan su experiencia.

Comparte en:

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp
Email