Por orden de la Fiscalía, efectivos de la Policía de Investigaciones llegaron hace unos días hasta la residencia del exfiscal Luis Toledo, con el fin de incautar su teléfono y computadora. Finalmente lo hicieron en la Facultad de Derecho de la Universidad San Sebastián, que es donde ahora trabaja y tenía los equipos.
¿La finalidad? Una serie de diligencias en el marco de una investigación -aún desformalizada- por presunto fraude al fisco, por la compra de un software -por parte del Ministerio Público-, para intervenir llamadas telefónicas que nunca se utilizó. La adquisición ocurrió en 2019, bajo el mandato de Jorge Abbot como fiscal nacional.
En ese entonces Toledo, quien fue director de la Unidad de Drogas, recomendó a la Fiscalía la compra del software Vigía Elite Advanced a la empresa Suntech S.A. Tuvo un costo alrededor de $1 mil millones y se hizo vía trato directo.
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En teoría, el programa aún está alojado y disponible en el sistema informático de la Fiscalía. Sin embargo, no tendría la capacidad de procesar las hasta cinco mil interceptaciones telefónicas que realiza la fiscalía cada mes.
En diciembre pasado y por orden de la Fisclía Nacional, el fiscal regional Xavier Armendáriz, jefe de la Fiscalía Metropolitana Centro-Norte, designó a José Morales a cargo de la investigación por presunto fraude al fisco por la compra.
«LIMITADA Y RESIDUAL»
Tras el allanamiento el fiscal envió un comunicado a Ciper Chile, que investigaba las diligencia.
“Quiero reiterar enfáticamente que mi participación en este proceso fue estrictamente limitada y residual, circunscrita exclusivamente a mi rol como Director de la Unidad de Drogas», especificó.
«Mis responsabilidades en ese contexto se restringieron al ámbito jurídico, proporcionando profesionales de mi equipo asesoría especializada para asegurar que las herramientas disponibles cumplieran con los estándares del Código Procesal Penal. No estaba dentro de mis deberes funcionarios autorizar la adquisición de softwares informáticos ni menos viabilizar su operación. Yo no soy profesional informático y carezco de competencias similares”, agregó Toledo.
Las otros dos investigados en a causa son el exgerente de la división informática de la Fiscalía Nacional, Óscar Zapata, y la abogada de la Unidad de Drogas, Carolina Zavidich, que todavía está a cargo del sistema de registro de solicitudes de interceptaciones.
El disco duro y el celular de esta última también fueron incautados.
Por decision de la Fiscalía Nacional ahora la investigación se traslado hasta la Fiscalía Regional de Los Ríos, y quedó a cargo de Tatiana Esquivel, fiscal regional que fue nombrada por Ángel Valencia en octubre de 2023.
La investigación es reservada.
