La exalcaldesa de Maipú, Cathy Barriga, podría volver a prisión preventiva, esto debido a la reformalización que enfrentará el próximo martes, esta vez por los delitos de malversación de fondos públicos y negociación incompatible.
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El Ministerio Público apunta a que la exautoridad habría utilizado recursos del municipio para pagar a cuidadoras de su hijo menor de edad mientras ejercía el cargo.
Esta nueva imputación podría llevar nuevamente a que la Fiscalía Oriente solicite prisión preventiva, medida que Barriga logró revertir durante el miércoles.
DINEROS PÚBLICOS
Uno de los ejes principales de esta nueva investigación apunta al supuesto uso de dineros públicos para financiar servicios privados, como el cuidado personal de su hijo, en dependencias municipales.
La declaración clave es la de Kimberly Guajardo, quien trabajó como niñera del menor entre enero y septiembre de 2017, y que actualmente es profesora de baile en la misma municipalidad.
En su testimonio, en calidad de imputada, Guajardo relató que fue contratada de manera informal por Barriga, sin contrato ni pago de cotizaciones. Acordaron un sueldo mensual de $500.000, que se le transfería directamente a su cuenta bancaria.
“Todo esto fue informal, nunca firmé nada, era un acuerdo de palabra”, afirmó, según información consignada por Meganoticias.
La joven explicó que cuidaba al niño en una oficina adaptada dentro del municipio.
“Se instaló un corral con goma eva y juguetes. A medida que el niño crecía, se hicieron cambios menores para adecuar el espacio”, detalló.
Guajardo también describió tensiones con el entonces asesor de Barriga, Luis Japaz, quien según ella la presionaba para usar uniforme de parvularia y la acusaba injustamente de usar objetos personales de la alcaldesa.
Finalmente, fue despedida tras ausentarse un día por una práctica de danza, y luego fue recontratada en otra función dentro del municipio.
CARTOLAS BANCARIAS
La niñera entregó a la Fiscalía cartolas bancarias con los depósitos recibidos en 2017, aunque no figura el origen de las transferencias.
En paralelo, la defensa de Barriga presentó un escrito negando las acusaciones y detallando pagos realizados a Guajardo y otras cinco cuidadoras, con excepción de una que recibió pagos en efectivo.
Luis Japaz, quien fue condenado por otra arista del caso Maipú, prestó una segunda declaración. En ella reafirmó que Kimberly Guajardo trabajó como cuidadora del hijo de Barriga.
Además, indicó que la “sala cuna” municipal no tuvo modificaciones estructurales, pero sí se acondicionó con elementos menores.
“La defensa dice que mis afirmaciones son falsas, pero me consta que ella trabajaba en esas funciones”, aseguró el exasesor municipal.
