Como una forma de proteger el patrimonio de su familia -según sus cercanos-, seis días antes de su detención, ocurrida el 14 de noviembre, el ex subsecretario del Interior Manuel Monsalve pactó la separación total de bienes con su esposa, la exconcejal de Los Álamos María Eugenia Garrido, con la cual se casó hace 31 años.
El exsubsecretario del Interior está imputado por la Fiscalía como presunto autor de violación y abuso sexual contra una subalterna del ministerio.
Según reveló Ex-Ante, el 8 de noviembre el notario de Lo Barnechea Patricio Corominas hizo la escritura pública de este trámite de separación de bienes de Monsalve, que permite proteger el patrimonio de cada cónyuge en caso de deudas o demandas civiles.
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Estando privado de libertad él tiene muy limitadas posibilidades de generar ingresos.
«ESTÁ ARRUINADO»
Todo esto trae a la memoria lo planteado durante la formalización de cargos de la exautoridad por parte de la ahora exintegrante de su equipo de defensa, María Inés Horvitz, quien aseguró que él «está arruinado» económicamente.
Ayer la Novena Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago rechazó la solicitud de la defensa de cambiar su medida cautelar mientras dure la investigación del caso de prisión preventiva a arresto domiciliario total.
El tribunal determinó que con base en la gravedad de los ilícitos que se le imputan su libertad «constituye un peligro para la seguridad de la sociedad, siendo la prisión preventiva la medida cautelar más adecuada, racional y proporcional para garantizar los fines del procedimiento».
Monsalve permanece en el Anexo Penitenciario de Cápitan Yáber, donde fue trasladado el pasado 23 de noviembre.
