La Comisión Unida de Defensa y Seguridad del Senado concluyó las votaciones del proyecto de Reglas de Uso de la Fuerza (RUF), finalizando así el debate sobre la justicia militar.
Ahora, tras adecuaciones técnicas de la secretaría, el proyecto estará en condiciones de enviarse a la Sala para su discusión.
Lea también: Cámara Baja aprueba por unanimidad RUF
Entre los aspectos abordados, se mejoró la redacción sobre la responsabilidad de los funcionarios de orden y seguridad que se encuentren “de franco”.
Esto se dio tras una solicitud del subsecretario del Interior, Luis Cordero, quien enfatizó la necesidad de que a estos efectivos se les apliquen tanto las reglas de uso de la fuerza como la legítima defensa privilegiada, asegurando protección legal a su actuar.
JUSTICIA MILITAR
Uno de los puntos más conflictivos del proceso legislativo fue la discusión sobre la competencia de la justicia militar en casos de actuaciones de efectivos de las Fuerzas Armadas.
Finalmente, la Comisión declaró inadmisibles las indicaciones que proponían que estos los juzguen tribunales castrenses, argumentando que estaban fuera de la idea matriz del proyecto.
El senador Kenneth Pugh (RN) defendió la necesidad de que el Estado proporcione una defensa y un tribunal especializado para los militares desplegados en misiones de seguridad.
No obstante, desde el oficialismo se ha advertido que esto podría generar un escenario de impunidad, debido al carácter secreto de los procesos militares y la falta de intervención de víctimas civiles.
CONTENIDO DEL PROYECTO
La comisión estableció ocho pasos en la aplicación de las Reglas de Uso de la Fuerza para las Fuerzas Armadas, así como la definición del uso de la fuerza potencialmente letal en defensa de infraestructura crítica y un sistema de eximentes de responsabilidad penal.
Bajo esa línea, el senador Iván Flores (DC) señaló que el proyecto logró un equilibrio entre quienes buscaban ampliar las facultades de las fuerzas de seguridad y quienes intentaban restringirlas en exceso.
Las RUF han existido previamente en reglamentos internos, pero desde hace dos años se ha buscado darles un rango legal. En los próximos días, el proyecto podría llegar a la Sala del Senado y, de ser aprobado, enfrentará un complejo tercer trámite constitucional, que podría derivar en una comisión mixta en el segundo semestre.