Viuda de Ronald Ojeda por su situación en el país: «No estamos seguras en Chile». Josmarghy Castillo habla a casi cinco meses del crimen de su esposo.
El exteniente venezolano, opositor al Gobierno de Nicolás Maduro y refugiado político en Chile, Ronald Ojeda, fue secuestrado de su hogar en la comuna de Independencia, hace casi cinco meses.
Su viuda, Josmarghy Castillo de 32 años se refiere a su situación en el medio El País.
“Mi vida se convirtió en una tortura de día y de noche. A veces no puedo dormir, porque me desespero ante cualquier ruido o llamada en la noche. No sólo estoy afectada yo, sino toda la familia (…) Ronald era mi pilar. Mi mundo ha estado paralizado durante estos meses” explica al medio.
Una parte de la entrevista se llevó a cabo luego de que la mujer y su cuñada Mayra Ojeda, salieran de Chile rumbo a Buenos aires, para ver si podían optar a un refugio político, según recogen distintos medios.
Comenta que no se quiere referir al tema, sin embargo, señala que «no estamos seguras en Chile”.
Luego de que se conociera la captura de uno de los implicados en el secuestro de Ronald Ojeda, comenta que “si antes me sentía insegura, ahora me siento peor. Tenemos miedo a represalias debido a que atraparon a uno más de ellos”.
Asimismo, Castillo señala que “nunca nos sentimos tranquilos. Yo le enviaba un mensaje a Ronald antes de llegar a casa, para que calculara el tiempo en que llegaría, porque si tocaba a la puerta y él no sabía quién era, comenzaba a ponerse nervioso. Nunca recibíamos visitas, nadie sabía dónde vivíamos, nos mudábamos mucho”.
EL MIEDO DE LA FAMILIA
La madrugada del 21 de febrero Ronald Ojeda fue secuestrado de su domicilio en Independencia, desde ese momento, ni su viuda ni su hermana viven tranquilas, recoge El País.
“No es un secreto los monstruosos crímenes del Tren de Aragua. No sentimos que tenemos las medidas de protección adecuadas. Cuando llegamos a Chile solicitamos refugio porque buscábamos seguridad, protección, considerábamos que era un país donde estaríamos seguras” asegura.
Incluso, indica que, “el gran problema es que para Chile es muy difícil aceptar que ya no es un país seguro para los refugiados, al menos no lo es para los venezolanos [en esa condición]”.
Y reiteró que “No estamos seguras en Chile. Sabemos que esta banda transnacional (Tren de Aragua) tiene el control de muchas zonas chilenas, lo que es inseguro y riesgoso. Vivimos con miedo y angustia. Hemos hecho muchas cosas para protegernos y, a pesar de eso, no nos sentimos en calma”.
EL CRIMEN
La mujer es consultada por la motivación del crímen a Ojeda, a lo que responde. «La punta de lanza de esto fue la captura del capitán Ányelo Heredia, quien menciona a Ronald en su declaración. Al nombrarlo, aparte de que ya lo tenían en el ojo, se vuelve como una pieza clave».
Por los asesinos de Ojeda, Castillo mencionó que espera que estos sean juzgados y cumplan condena en Chile, ya que si lo hacen en Venezuela, “es como si estuvieran en un hotel de lujo”.
“Por eso nosotras pedimos ayuda al FBI, para que se logre identificar la huella que no se pudo cotejar en Chile y el ADN de los cabellos encontrados en el cuerpo de Ronald. Queremos dar con otros nombres, poner la alerta a nivel internacional y que estas personas sean capturadas”, sñaló.
Finalmente se refirió a las leyes, «las leyes chilenas deberían ser más duras con menores que cometen homicidios intencionales o secuestros. Este joven, que cuando fue detenido tenía 17 años, estaba consciente de que lo que hacía estaba mal», zanjó.