Pese al receso, las polémicas continúan. La sanción a Max Verstappen por usar lenguaje inapropiado en rueda de prensa ha hecho saltar las alarmas. El neerlandés ha dejado caer que empieza a cansarse de situaciones como esas.
Helmut Marko, asesor principal del equipo de Red Bull, ha sido el último en valorar la situación y advirtió que «hay que tomarse a Max en serio».
Todo esto comenzó en la zona mixta del Gran Premio de Singapur. El tricampeón del mundo declaró que “llegué a la quali y vi que el coche estaba jodido”, a lo que el presentador en ese momento le comunicó que tenía que cuidar su lenguaje, pero Max volvió a la carga sentenciando que “seguiré diciendo palabrotas, aquí o en otro sitio. La gente usa ‘malas palabras’ cuando está llena de adrenalina
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Esto le costó una sanción que tendrá que pagar con trabajo comunitario y social junto a la Fórmula 1.
Tiempo después, Verstappen manifestó que «este tipo de cosas definitivamente también deciden mi futuro», dijo ante los medios en Marina Bay. «Ahora estoy en la etapa de mi carrera en la que no quieres estar lidiando con esto todo el tiempo. Es realmente agotador. Para mí, esa no es una forma de continuar en el deporte».
Ahora bien, situación más curiosa se dio al día siguiente. El neerlandés llegó a dar una rueda de prensa alternativa a la oficial, fuera de la sala habitual, para atender a los periodistas. Una imagen muy poco habitual que dejaba clara la señal de protesta del piloto de Red Bull. Estaba enfadado y tanteó la posibilidad de una posible retirada.
El espaldarazo de Marko
Uno de los primero en respaldar el ‘cabreo’ de Verstappen fue Helmut Marko, quien en declaraciones recogidas por Marca, aseguró que Max es capaz de irse del ‘Gran Circo’.
En sus palabras, Marko detalló que “hay que tomarse a Max en serio. Ha conseguido mucho, pero para él es importante disfrutar de todo el deporte”.
“Si eso se le estropea cada vez más, entonces es de un carácter que cuando dice ‘vale’, ya está. O disfruta o se va de la F1″, aseguró.
Finalmente, sentenció que Verstappen «no se refería a una persona. Se refería al coche, a un objeto, y lo hizo de forma displicente». Medita un poco Marko y continúa. «Quizá en una rueda de prensa por la tarde, si todo se va a tratar de forma tan estricta, en el futuro se adopte un enfoque diferente, pero es claramente exagerado”.
