Entrevistas y Reportajes

Trasplantes en Chile, la necesidad de crear una cultura de donantes.

Cristian Navarro H.

En España donan 47

Los primeros trasplantes en nuestro país se iniciaron en la década de 1960, poco años después que se iniciaran a nivel mundial. Desde esos años a la fecha se han realizado más de 12 mil trasplantes de órganos solidos (TXO), para muchos sería una gran cantidad, pero si les decimos que esta cifra se ha conseguido con una donación de órganos muy baja ¿Qué diría?

Nuestro país puede compararse, a la hora de realizar trasplantes, con los mejores centros internacionales, en resultados obtenidos en términos de supervivencia de los pacientes, los órganos y las complicaciones del procedimiento, pero cuando se habla de los donantes, inmediatamente saltamos del podio y no paramos de caer hasta llegar a los últimos lugares.

Los peores de Latinoamérica

Según datos entregados por la Academia Chilena de Medicina (ACM), en el artículo Donación y Trasplante de órganos: propuesta desde la ACM, las tasas de donaciones a nivel mundial están entre 2 y 47 donantes por millón de habitantes. En Europa el promedio es de 22 personas, siendo España el que ostenta el título con 47 personas por millón.

En Estados Unidos el número llega a 32 y en países como Uruguay, Argentina y Brasil, los donantes llegan en promedio a 20.  Y en Chile, solo tomando los datos de la última década, las donaciones fluctúan entre 6 y 10 personas, arrojando un promedio de 6,6 donantes por millón, la más baja de la región.

Y con los años esta baja cantidad de donantes se va agravado por que las personas que necesitan ser trasplantadas ha aumentado, hasta el cierre de esta nota estaban a la espera de un corazón 16 personas, de pulmón 42, de hígado, 241, páncreas 20 y 1875 esperando un riñón.

Según la ACM si se tuviera, por ejemplo, la tasa de donación de España, se podrían lograr anualmente más de 800 donantes efectivos, pero la realidad es que en promedio las donaciones no superan las 120, aunque según datos del Ministerio de Salud (Minsal), el año 2022, las donaciones fueron 148 y este año ya van en 169.

¿Por qué es tan baja, si en Chile por ley todos somos donantes universales?

Desde el inicio de los trasplantes en Chile se legisló sobre el tema, en 1953 se dictó la Ley 15.262, que permitió este tipo de procedimientos, pero en 1982 recién se introdujeron los conceptos de donante vivo, cadáver y la muerte encefálica y en el año 2010, se definió quienes son donantes y cómo se manifiesta la voluntad de serlo, creándose el Registro de Donantes en el Registro Civil.

El año 2013, con la aprobación de la Ley 20.673, se estableció el donante universal. Es decir que todos somos donantes de órganos. Pero se puede indicar en una notaria o en el Registro Civil, cuando se saca o renueva la cédula de identidad o carné de conducir, que no queremos ser donante.

En el año 2019 la ley 20.413 se especifica que la voluntad de “no ser donante”, debía ser especificada antes de 12 meses, normalizando el registro de donantes. Es decir, si Usted no se inscribe en el registro de “no donantes”, sus órganos pueden ser ocupados para trasplante.

¿Es así de simple?

Para Natalia Serón, presidenta de la Fundación Cambiemos la Historia, si se cumpliera con la ley, nuestro país no estaría en los últimos lugares en materia de donación de órganos.

“Las cifras son tan bajas por un problema multifactorial, primero está el tema del consentimiento de la familia, luego está la capacidad que tienen los hospitales para realizar los procedimientos para los trasplantes, otro la capacidad que tienen los médicos para realizar las operaciones, la logística para el traslado de órganos de una región a otra y así suma y sigue”, explicó Natalia Serón.

Los datos de la ACM están en la misma línea de lo que explica Serón, incluso indica que la Coordinador Nacional del Trasplante del MINSAL tiene una limitada autonomía en su quehacer, con escas capacidad de fiscalización efectiva y de intervención para modificar deficiencias y corregir errores en los centros de salud.

¿Cuál es el principal problema para aumentar las donación de órganos?

Para Serón el aumento de las donaciones no pasa por las leyes, sino por cambiar la mala percepción que tienen las personas con el tema de las donaciones de órganos.

“Lo que nosotros podemos hacer como sociedad civil, como miembros de la sociedad es tratar de cambiar la percepción de las personas, es decir educar a la población sobre la importancia de la donación de órganos, para  que el consentimiento por parte de la familia sea algo natural”, explicó Serón.

Para la Academia Chilena de Medicina educar a la población chilena sobre la importancia de la donación de órganos no ha sido eficaz, por eso existe la alta tasa de rechazo familiar frente a la donación.

Lea también La eutanasia en Chile: El debate sobre el derecho a una muerte digna

Entre los factores que atentan contra la donación son derivados del desconocimiento de la postura prodonación de la Iglesia Católica, factores educacionales, culturales y generacionales.

Los que no desean donar, según el estudio de la ACM, son mayores de 40 año, con menor nivel educacional, que no conocen nada sobre el tema de los trasplante, que nunca han interactuado con alguien que ha sido trasplantado. Además de no saber que significa muerte encefálica y privilegian la voluntad familiar por sobre la voluntad individual.

Se sabe que conductas prodonación provienen de experiencias positivas de terceros, mientras que la de no donación aumenta por falta de información

La educación es la clave

Para Natalia Serón la clave para mejorar el número de donantes pasa por crear una cultura del trasplante, enseñar desde muy niños la importancia de ser donante.

“La idea es enseña a los niños que donar tus órganos cuando ya no los necesitas es una cosa obvia, que no debería ser una discusión, que forme parte de la idiosincrasia. Es ahí donde es importante que forme parte de la educación que ser recibe”, explico Serón.

Por su parte la ACM indica que la educación es fundamental para lograr una cultura favorable a la donación que permita satisfacer las necesidades de trasplante de una población, por lo que es imprescindible involucrar a todos los actores sociales.

“Se debe considerar una educación comunitaria, escolar, universitaria, de las carreras de salud, medios de comunicación y redes sociales. El objetivo es instaurar dicha temática a nivel familiar, iniciando este proceso en la educación básica, destacando la importancia de la donación desde el punto de vista social, reforzándolo en la enseñanza medía, sumando los conceptos de muerte cerebral, donación con donante vivo y cadáver y el impacto social del trasplante en la calidad de vida de los receptores”, indica el texto de la ACM

 

Comparte en:

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp
Email