Campaña en RRSS le entrega nueva casa a pareja de abuelos. El matrimonio había quedado en la calle. La historia de los abuelos y el dolor de haber perdido el hogar en el que vivieron por años tocaron la sensibilidad de los oyentes quienes tuvieron una solidaria reacción.
Don Pedro y la señora Pascuala vieron con pesar cómo su casa pasó a ser desde un lugar seguro a un motón de escombros. En cosa de minutos lo perdieron todo.
Las llamas de los siniestros forestales llegaron hasta donde vivieron por décadas. El sector Monte Sinaí de Viña del Mar.
En compañía de Dios
Devastado, el hombre sólo se preocupó de pedirle a quienes llegaron a ayudarlos una Biblia, pues perder la suya era “lo que más le dolía”.
Luego de una campaña en Instagram, los jóvenes que llegaron a auxiliarlos consiguieron no sólo una, sino “como treinta” Biblias, así como comida y lentes.
Lo más sorprendente y conmovedor fue el regalo más grande que les entregaron. Una nueva y completa casa para que estuvieran seguros y protegidos.
Según relató en conversación con BioBioChile Elenna Mendes, una joven TENS viñamarina y ex bombera que encabezó la iniciativa.
La voluntaria viralizó la historia de esta pareja, todo comenzó con una foto.
El abuelo que rompió el corazón
“El día martes, fui a ayudar a una amiga que vive en Monte Sinaí porque sus abuelos perdieron la casa, y estábamos todos trabajando ahí”, relató.
Fue entonces que vio a Don Pedro “viendo las ruinas de lo que fue su casa, y quise ir a darle contención emocional”.
Entonces, le preguntó su nombre y escuchó atenta su historia.
Fue ahí cuando el anciano aún con dolor contó cómo vivió ese duro episodio.
«El día viernes había llegado el incendio y él no quería salir de su casa, así que salió cuando el fuego venía a diez metros», contó
Recuerdos entres escombros
«Estaba a la nada misma, porque él quería protegerla hasta el final»
Aseguró que no tenía a nadie, por eso tampoco habían ido a sacar los escombros. Ya llevaban del viernes hasta el martes y nada.
“Justo empezaron a llegar a sacar todo de a poquito para poder ir despejando el lugar, para ver qué se podía hacer», expresó la joven.
«Ahí le pregunté, cuando ya me había hecho llorar un montón con todo lo que me contó, si podía sacarle una foto y subir su historia a las redes sociales”, narró.
«Le tomó la fotografía, y publicó el relato. Entonces, el ‘milagro’ ocurrió» aseguró.
La respuesta de la gente
“Llegaron a comentarme muchas personas y amigos ‘Mira, le conseguimos un colchón’.
«‘Le conseguimos los lentes’, ‘le conseguimos la placa’. Empezaron de a poquito y era súper emocionante», recordó.
Unas hermanas, dos de ellas en Chile y una que está en Canadá, se movieron para hacer las gestiones con los lentes.
«Vino una odontóloga también a terreno a ver el tema de la placa. Y bueno, Empezamos a recibir un montón de mensajes para ayudarlo», dijo
Continuó. “Llegué mi casa en la noche respondiendo muchos mensajes que habían llegado y me llama una amiga y me dice que vea Instagram.
El milagro de las redes
«Me advierte, ‘¡oye, puedes pescar Instagram porque te está mandando un mensaje hace rato y tú no estás respondiendo!’ me meto, quedé en shock»
Primero alguien decía que quería donarle una cocina, un refrigerador, pero obviamente no se puede recibir nada porque no hay casa.
«Le explico todo esto y me dice ‘nosotros somos de Algarrobo y queremos con mi familia ayudar a un adulto mayor´»
«‘Esta persona dijo siento que va a llegar el el invierno, y puede que el gobierno todavía no ponga nada'», expresó.
«Dios me lo quitó»
«‘Es necesario que un adulto mayor tenga sus cositas ahora para no pasar frío, ni enfermarse más. Les va a costar más reponerse a todo esto’», detalló.
Entonces, la sorpresa: “así que me dice ‘Nosotros le donamos una casa prefabricada’. Ahí lloré yo, lloró mi amiga lloró mi mamá, lloramos todos”.
“Preparamos toda la sorpresa, y no dormí toda esa noche pensando en cómo le iba a explicar todo esto para no darle un susto y que terminara enfermándose o algo”, admitió.
“Llegamos al día siguiente con un grupo de amigas y llegó él muy temprano y él nos decía lo que sentía».
«‘Bueno, Dios me lo quitó, pero veamos si es que logramos parar una media agüita o lo que sea, no sé’», cuenta aún aungustiada.
Gesto conmovedor
Sólo entonces se acercaron para revelar la noticia a la pareja.
“Los juntamos a los dos, y les quisimos contar la historia. Fuimos de a poquito», aseguró.
«Le habíamos conseguido la óptica, la placa, que habían mandado ayuda, que nos contactaron de otras regiones y países, de todos lados para saber de él».
«Llegó el momento y le contamos que teníamos la casa prefabricada. Ya ahí lloramos todos», cuenta.
Una nueva familia
«Lloramos personas que no nos conocíamos, y hay personas que han comentado de todos lados que lloraron mucho con el video”, detalló emocionada.
Don Pedro no tenía familia, pero ahora “ya nos adoptó a todos y todos somos sus nietos».
«De hecho, una vez que esté todo esto listo, quiero invitar a todas esas personas que ayudaron a tomar té con don Pedro”, advierte.
Don Pedro y su esposa Pascuala perdieron todo en los incendios de #Valparaíso, y Elena, una voluntaria, logró lo imposible. Juntó fondos y gracias a donaciones lograron varias sorpresas, entre ellas, una casa prefabricada para que tengan donde dormir. [🎥: IG elenna .mendes] pic.twitter.com/aObtknKnj7
— Meganoticias (@meganoticiascl) February 8, 2024
