Un equipo de científicos descubrió una zona clave en el cerebro donde se concentran los cambios genéticos que inducen el envejecimiento.
Este hallazgo, publicado en la revista Nature, es el resultado de un exhaustivo mapeo genético de más de 1,2 millones de células de 16 regiones cerebrales de ratones jóvenes y viejos.
HIPOTÁLAMO Y ENVEJECIMIENTO
El hipotálamo es una región del cerebro que es responsable de regular funciones vitales como la temperatura corporal, el metabolismo, niveles de sueño, sueño circadiano, hambre, presión sanguínea y el uso de nutrientes.
En el estudio se reveló un «punto caliente» que, con la edad, aumenta la actividad de los genes asociados a la inflamación y disminuye la de los genes relacionados con la estructura y función neuronal.
Estas alteraciones genéticas se concentran en las células cercanas al tercer ventrículo del hipotálamo, donde se controlan temperatura corporal, ingesta de alimentos, uso de energía y nutrientes.
La investigación fue financiada por los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos, en el marco de la ambiciosa iniciativa de investigación cerebral BRAIN.
RATONES EXPERIMENTALES
Investigadores suelen recurrir a cerebros de ratones para desenmarañar el funcionamiento humano, debido a las similitudes que compartimos como: estructura, función y genes.
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DIETA Y ENVEJECIMIENTO
De acuerdo a los autores, este hallazgo podría tener implicaciones significativas para el desarrollo de terapias destinadas a ralentizar o controlar el deterioro cognitivo asociado al envejecimiento.
Específicamente, a través de intervenciones dietéticas o farmacológicas para mejorar la eficiencia de estas células y, con ello, retrasar el proceso de envejecimiento.
Esto, debido a la conexión entre la dieta, el estilo de vida, el envejecimiento cerebral y los cambios genéticos que pueden influir en una mayor vulnerabilidad a los trastornos cerebrales relacionados con la edad.
Además, se alinea con otros estudios recientes que han relacionado el envejecimiento con cambios metabólicos.
