Los recientes dichos de José Miguel Villouta contra Natalia Valdebenito, a quien acusó de haber “destruido” su carrera televisiva, han traído de vuelta el tweet que quebró su amistad.
En concreto, fue en 2017 cuando el periodista conducía el programa de Vía X, ‘El Interruptor’, ironizó en X (Twitter en ese entonces) sobre el movimiento feminista, al que calificó como «penca». «Las feministas chilenas son tan chilenas que en ninguna librería he podido encontrar El Cuento de la Criada. Acá el canon es así de penca», escribió, según recogió Página 7.
Tras ello, sus dichos en contra no se detuvieron ahí. Esto, debido a que Villouta intentó apagar el fuego con más fuego, pues ante las críticas que recibió respondió con frases del estilo «vaya a prepararle un sándwich al pololo o al papá».
Cabe mencionar que la última vez que el periodista estuvo en pantalla fue cuando conducía el mencionado programa de Vía X, del que salió por una polémica. La cual, fue luego de que en medio de una entrevista con el Pastor Soto este pisara una bandera LGBTQ+, colectivo al que pertenece el comunicador.
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ENEMISTAD ENTRE VALDEBENITO Y VILLOUTA
La disputa comenzó cuando la comediante respondió al mensaje de un seguidor en Instagram: «Y Villouta?», le consultaron, a lo que Valdebenito contestó: «Está haciendo vídeos escondido mientras yo trabajo dando cara».
Ante el agravio, Villouta respondió con una columna en su blog personal. «Lo que hizo en su programa destruyó mi carrera de 20 años. Una carrera que en esa época un gay tenía que lograr esforzándose tres veces más recibiendo el tercio del sueldo», escribió Villouta.
Junto con ello, aseguró que la actriz llevó invitados a sus programas «con el objetivo de iniciar una campaña donde terminé siendo señalado como misógino y racista».
«La cesantía que provocó su movimiento en mi contra, hizo que estuviera 6 meses sin sonreír luego de que se me cayeron dos dientes y hoy no tengo dinero para comprarme anteojos para ver de lejos y así descansar viendo televisión. Y sólo tengo tres buzos negros», agregó.
«Si necesito dinero para comprar cigarros, tengo que pedirle a alguien. No puedo ayudar económicamente a mi madre viuda. Y, estamos vendiendo nuestra casa porque se nos está acabando el dinero. No sé qué va a pasar conmigo cuando tenga 60 años. No tengo dónde caerme muerto», aseveró.
