Este sábado, el Museo Interactivo Mirador (MIM) inauguró su Espejo Cosmobotánico, un biotopo con características de humedal que pasa a formar parte del recorrido por el Bosque Adriana Hoffmann.
El proyecto fue diseñado por GUN Arquitectos y producido por Common Land Studio, contó con la asesoría de Fundación Chilco y Acuáticas Vivero.
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Y fue financiado por el Programa Ciencia Pública 2023 del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación.
Este, tiene por objetivo entregar una experiencia de acercamiento a la naturaleza mediante una mirada interdisciplinaria.
Fusionando la arquitectura, la botánica, la hidráulica y el paisajismo, en una propuesta que representa un paisaje de la zona norte y centro de Chile.
Pocas áreas verdes
Pablo Brugnoli, jefe de la División de Ciencia y Sociedad del Ministerio de Ciencia, señaló:
«Lo que estamos inaugurando hoy día es un laboratorio natural de biodiversidad, donde se reúnen muchas especies y están ocurriendo muchas interacciones entre ellas».
«Es abierto a las personas, niños, niñas, jóvenes y adultos que visitan el museo», agregó Brugnoli.
Según el Catastro de Parques Urbanos, La Granja, es una de las comunas de la capital con menor densidad de áreas verdes.
Por lo que el proyecto fue diseñado para potenciar la biodiversidad.
Así, esta iniciativa no solo contribuye a la biodiversidad local, sino también a fomentar una cultura natural en la comunidad.
Del mismo modo, apunta a reconocer la importancia del agua y las especies asociadas a su existencia, siendo un aporte para la comprensión de lo que es la interacción con la naturaleza.
Masa vegetal de hierbas
Jorge Godoy, arquitecto de GUN Arquitectos y coautor del Espejo Cosmobotánico enfatizó en que esta iniciativa «abre la conversación no solo en relación a la naturaleza».
Sino que «también sobre cuál es nuestro rol dentro de ella».
Y continuó destacando que «tiene una dimensión afectiva muy profunda porque nos hace pensar de manera colectiva y nos da la calma para poder observar estos ecosistemas».
La vegetación que ha crecido en el Espejo Cosmobotánico es resultado de la instalación de más de 1.500 sacos cargados de tierra orgánica y semillas.
Así, con el paso del tiempo han creado una masa vegetal de hierbas, juncos y una creciente población de insectos, aves y mamíferos que han encontrado aquí un hogar y espacio de resguardo.
Especies en amenaza
Cabe destacar que, algunas de estas especies se encuentran en una categoría de amenaza, clasificadas en peligro crítico o vulnerables.
Incluso, hay siete de ellas que pasan a formar parte del programa Sitio Seguro de Conservación (SSC) de la Fundación Chilco, como hábitat seguro para las especies arbóreas endémicas amenazadas.
De modo que, actúa como banco de colecciones vivas para conservar especies nativas.
El Espejo brinda una experiencia en medio de una atmósfera de sonidos, texturas, aromas, colores y formas.
Además de observar procesos biológicos de formación de microclimas, incorporación de nuevas especies vegetales y animales.
