Los resfríos de verano son algo muy común y poco esperados, ya que existe la creencia de que estos llegan junto con el frío.
Sin embargo, no es precisamente las bajas en la temperatura lo que provoca resfríos.
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El doctor Sebastián Solar, infectólogo de la Clínica Alemana explica a The Clinic que las enfermedades respiratorias están presentes durante todo el año.
«Uno piensa que con el buen clima se acaba todo esto: es cierto que es más fácil ventilar, que estamos en espacio abierto y eso disminuye el riesgo de contagiar, pero no es cero», destaca el especialista.
Y señala que el principal problema es que «tenemos movilidad, viajeros que vienen desde áreas de invierno donde circula la influenza, o que van por vacaciones o trabajo hacia países donde hay más circulación de virus, y como esto se transmite por gotitas o contacto, tenemos posibilidad de ver enfermedades respiratorias aún en el más lindo de los días del verano».
Los concejos en los que todos los especialistas coinciden es el mantener un buen lavado de manos y evitar el contacto con otras personas que estén pasando por un resfrío. Especialmente si existe un mayor riesgo de agravamiento.
Asimismo, explica que «si hay signos de deterioro como fiebre que no responda a remedios o dificultad respiratoria, puedan asistir a una atención de urgencia si fuera necesario».
Según un artículo publicado por la Clínica Las Condes, no tiene un vínculo directo las acciones características de verano como pasar mucho tiempo en la piscina o quedarse con la ropa mojada y el resfrio.
De hecho, los vírus más comunes en verano son «los adenovirus, rinovirus -resfriado común-, enterovirus, y en menor medida la influenza y parainfluenza».
