El fiscal especial Jack Smith presentó este lunes una solicitud formal para desestimar el caso contra Donald Trump relacionado con el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021.
La petición llega semanas antes de que el presidente electo de Estados Unidos tome posesión el próximo 20 de enero.
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Smith argumentó que la normativa interna del Departamento de Justicia prohíbe procesar penalmente a un presidente en ejercicio, lo que hace inviable mantener las acusaciones contra Trump una vez asuma el cargo.
Smith afirmó en el escrito judicial que consultó con la Oficina de Asesoría Jurídica y concluyó que «la acusación debe ser desestimada antes de que el acusado tome posesión del cargo».
La decisión de solicitar la desestimación está directamente vinculada a los resultados electorales del 5 de noviembre, en los que Trump resultó ganador, revirtiendo así su condición de expresidente procesado a presidente electo.
EL PROCESO YA ESTÁ EN PAUSA
La jueza federal Tanya Chutkan, quien lleva el caso en el tribunal del Distrito de Columbia, ya había concedido el pasado 8 de noviembre una pausa en el proceso. Esto permitió a Smith analizar las implicaciones legales del cambio de circunstancias tras la victoria electoral de Trump.
Acusan a Trump de intentar revertir los resultados de las elecciones presidenciales de 2020, en las que perdió ante Joe Biden, y de presuntamente incitar el asalto al Capitolio.
Sin embargo, su reciente victoria electoral ha comenzado a transformar su panorama judicial. Durante su campaña, el republicano prometió que, en su primer día como presidente, despediría a Smith y ordenaría cerrar todas las investigaciones en su contra, calificándolas como una «persecución política» impulsada por sus oponentes.
Trump enfrenta cuatro procesos penales, incluido uno en el que lo condenaron en mayo de este año por falsificar documentos para ocultar pagos a la actriz Stormy Daniels.
Aunque esta condena lo convirtió en el primer expresidente de Estados Unidos declarado culpable en un caso penal, la sentencia quedó aplazada sin fecha.
La victoria de Trump refuerza su posición frente a la justicia, marcando un giro significativo en los múltiples procesos legales que enfrenta y abriendo el camino hacia una nueva etapa en su controvertida carrera política.