Valparaíso: Victimas de megaincendio siguen sin hogares
El poder ejecutivo sigue impulsando el proceso de reconstrucción para las víctimas afectadas por el megaincendio en la región de Valparaíso.
Los vecinos damnificados por la emergencia subrayaron la importancia de los programas de apoyo económico promovidos por el gobierno central, como los subsidios de arriendo y los bonos de acogida. Estos son cruciales para la estabilidad de muchas familias que aún no han podido encontrar un hogar, casi cinco meses después del megaincendio.
En la misma línea, la alcaldesa de Viña del Mar, Macarena Ripamonti, cuestionó los criterios del Gobierno para la entrega de subsidios de arriendo.
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Dichos de la alcaldesa de Viña del Mar
En contraste, la delegada presidencial regional subrogante de Valparaíso, Paula Gutiérrez, enfatizó la importancia de revisar los análisis de forma individualizada, ya que estos deben ajustarse a las diferentes realidades de los afectados por el megaincendio.
Por un lado, Elizabeth Valenzuela, residente del campamento Manuel Bustos, y Yenny Fuentes, vocera de los damnificados de Pompeya Sur en Quilpué, expresaron críticas hacia la efectividad del proceso de selección para la entrega del subsidio.
Es fundamental destacar que el subsidio de arriendo y el subsidio de acogida representan apoyos económicos disponibles para aquellos que han completado la Encuesta Familiar Única de Emergencia y pueden demostrar haber sido afectados por una catástrofe. Estos subsidios están diseñados para ayudar a las familias y hogares que han sufrido pérdidas o daños significativos debido a eventos como desastres naturales, incendios u otras emergencias graves.
Hay que recordar que el subsidio de arriendo está destinado a personas que han perdido su vivienda habitual y necesitan asistencia temporal para cubrir los costos de alquiler de una nueva residencia. Por otro lado, el subsidio de acogida está dirigido a aquellos que están dispuestos a acoger a personas desplazadas o afectadas por la emergencia en su hogar, proporcionándoles un entorno seguro y acogedor durante un período determinado.
