«Si tiene antecedentes y los presenta, sería algo muy grave, pero si no los tiene, también es de gravedad, porque hace imputaciones que ofenden a más de cuatro mil funcionarios», dijo el fiscal nacional, Ángel Valencia, frente a las declaraciones de ayer del gobernador metropolitano, Claudio Orrego, sobre las filtraciones judiciales.
Este criticó que el Ministerio Público «no pueda realizar ninguna investigación de manera secreta» y que «todo lo que llega a la Fiscalía termina en la prensa».
Más todavía, acusó que «es abismante, porque quiere decir que alguien aquí está moviendo plata. ¿Cómo llega tanta información a la prensa?».
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Todo esto se da en el marco de la frustrada compraventa de la Clínica Sierra Bella y los chats entre la diputada Karol Cariola y la exalcaldesa de Santiago Irací Hassler.
«NO SE PUEDE DESCARTAR»
Hoy el fiscal nacional, en conversación con Radio ADN, dijo que «no se filtra todo, afortunadamente, pero esto es la consecuencia de un problema estructural que tiene su origen en un mal diseño legal, en un diseño legal defectuoso, y que la Fiscalía ha tenido que sobrellevar por décadas».
Especificó que «la ley nos obliga a entregarle copias de la investigación, a partir de ciertos momentos, a cualquier persona que se haga parte del caso. Copias íntegras de la investigación».
Aún así, Valencia reconoció que «no se puede descartar que haya filtraciones que se originen en la Fiscalía».
Pero descartó que se pueda concluir que siempre es así, pues «no se condice con los hechos, no se condice con la realidad. No es ni justo, ni correcto, ni tampoco muy prudente, ni razonable», aseveró.
«NECESITA SER MEJORADO»
También descartó que exista una operación política dentro de la Fiscalía Nacional. “Si eso ocurre de esa manera, no se origina en la Fiscalía Nacional, y lo digo con altísimo nivel de certeza de que tampoco en nuestra unidad de la Fiscalía”, enfatizó.
El fiscal nacional ahondó en que han solicitado medidas al ministerio de Justicia, como inversión en tecnología y nuevos criterios para los fiscales sobre la reserva de antecedentes.
“Ustedes advirtieron que el fiscal Cooper ha destacado en gran medida que el primer informe (de los chats entre Karol Cariola e Irací Hassler en el caso de la Clínica Sierra Bella) se entregó con partes tarjadas. Eso es consecuencia de una instrucción general que impartimos el año pasado. Eso no se hacía”, aclaró.
“Esto hemos planteado que necesita ser mejorado. Necesitamos perfeccionar las normas que permitan que, en estas causas que tienen relevancia política, cualquier ciudadano de a pie pueda presentar una querella si cuenta con un abogado, y luego, por esa vía, transformarse en interviniente en la causa. Como consecuencia de nuestra legislación, tenemos que entregar copias de todo lo que se investiga”, reiteró.