El fiscal regional de Coquimbo, Patricio Cooper, sigue a cargo tanto de las indagatorias por Sierra Bella como de la arista de los chats de Karol Cariola, no ha sido «removido» y «por el moment no hay ninguna decisión de esa naturaleza», aclaró el fiscal nacional, Ángel Valencia.
Lo hizo a raíz de algunas interpretaciones surgidas tras el anuncio de que la fiscal de Valparaíso, Claudia Perivancic, llevará adelante la indagatoria de oficio por eventuales filtraciones del caso Cariola que, a su vez, es arista del caso Sierra Bella.
«Es habitual en el Ministerio Público, que cuando hay una denuncia por filtraciones que se producen dentro de una causa, disponemos que la investigación por esas filtraciones la lleve un fiscal distinto», explicó.
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«Así ocurre, por ejemplo, quizás ustedes recuerdan en el caso de Hermosilla, que la investigación (por filtraciones de chats) la lleva el fiscal (Marco) Pastén», agregó.
Especificó que se trata de «una decisión muy frecuente en el Ministerio Público, que cuando se produce una denuncia o se abre una investigación por una violación de secreto, que se habría producido eventualmente en una causa que lleva un fiscal» esa investigación la lleva un fiscal diferente.
Esto, porque -dijo Valencia-, «muy probablemente muchos esperan también que se establezca si tuvo participación directamente ese fiscal o su equipo en ese incidente».
POR INICIATIVA PROPIA
Según el jefe del Ministerio Público, cuuando se dieron a conocer los chats entre la diputada Karol Cariola y la exalcaldesa de Santiago Irací Hassler el fiscal Cooper abrió de oficio una investigación, «por iniciativa de él».
Luego, el lunes, el Fiscal Nacional decidió que esa invstgación la llevara la fiscal regional de Valparaíso.
Valencia calificó la iniciativa de Cooper de abrir la indagatoria de oficio por las filtraciones como el acto «diligente» de un fiscal a cargo de una causa «que advierte que, aparentemente, se ha producido una violación de secreto».
¿RENUNCIA?
El fiscal nacional fue consultado por el anuncio de que se solicitará su remoción del cargo y respondió que «no he recibido información oficial sobre el particular, pero en general» y que ante ese tipo de comentarios «nos abstenemos de emitir opinión porque se refieren a las atribuciones institucionales de parlamentarios».
Tampoco opinó de la posibilidad de que parlamentarios oficialistas acudan a la Corte Suprema para solicitar la remoción del persecutor.
«Yo quisiera que estas cosas no ocurrieran, pero no son infrecuentes. Así ocurrió con el fiscal regional de Biobío, con el fiscal Armendáriz… que fueron rechazadas», especificó.
Al respecto Valencia afirmó, asimismo, que él no ha recibido ninguna petición en orden a cambiar al fiscal Cooper.
«Normalmente, el hecho de que se presente una solicitud de remoción en el Ministerio Público, les recuerdo los casos más recientes, no ha sido un motivo suficiente como para que un fiscal tenga que dejar la causa. Por el momento, no hay ninguna decisión de esa naturaleza», detalló.
