Las protestas en Bolivia escalaron este lunes 2 de junio, cuando simpatizantes de Evo Morales bloquearon carreteras en el centro del país y se movilizaron en distintas ciudades, incluida La Paz, para exigir la habilitación de su candidatura presidencial y la dimisión del presidente Luis Arce.
“Desde este momento las movilizaciones se masifican en todo el territorio boliviano”, declaró Pedro Llanque, dirigente campesino afín a Morales, en una rueda de prensa en la capital. Las acciones se producen tras el rechazo del Tribunal Supremo Electoral (TSE) a la postulación del exmandatario, quien, además de no contar con partido político, está impedido por un fallo judicial que limita a una sola la reelección presidencial.
Morales, que gobernó entre 2006 y 2019, intentó inscribirse como candidato para los comicios del 17 de agosto con el Partido de Acción Nacional Boliviano (Pan-Bol), pero la sigla fue cancelada al no superar el 3 % de votos en las elecciones de 2020. El plazo para oficializar candidaturas vence el 6 de junio.
MARCHAS PARALELAS Y BLOQUEOS EN BASTIONES DE MORALES
En La Paz, centenares de campesinos e indígenas marcharon por el centro exigiendo el regreso de Morales y acusando al gobierno de Arce de utilizar al poder judicial para impedir su retorno al poder. Paralelamente, comerciantes se manifestaron por la crisis económica, denunciando la escasez de dólares y combustibles provocada por la baja en la producción y exportación de gas.
En Cochabamba, región considerada bastión del exmandatario, se levantaron al menos nueve bloqueos en vías estratégicas que conectan con Santa Cruz y La Paz. Desde el gobierno, el ministro de Gobierno, Roberto Ríos, criticó la movilización: “El bloqueo busca boicotear las elecciones generales en favor de una candidatura inhabilitada y sin respaldo legal”, afirmó.
MORALES LLAMA A RADICALIZAR LA PROTESTA
El domingo, el propio Evo Morales instó a sus seguidores a intensificar la presión: “Desde el lunes, todos a La Paz. ¡Ya basta! ¡A hacernos respetar con este gobierno!”, declaró en su programa radial Kawsachun Coca. La semana pasada, las movilizaciones dejaron más de 20 civiles detenidos y tres policías heridos durante enfrentamientos en la capital.
El conflicto agrava las tensiones internas dentro del oficialismo boliviano y profundiza la división entre el actual presidente Luis Arce y su antecesor, en medio de un clima político marcado por la incertidumbre electoral.
🇧🇴🗣️ | Los seguidores del dirigente cocalero Evo Morales anunciaron la radicalización de las protestas, con bloqueos de caminos en rechazo a la crisis económica y para exigir la renuncia del presidente de Bolivia, Luis Arce. Entre otras demandas, también está la inscripción de… pic.twitter.com/AbzAm5pC0J
— PanAm Post Español (@PanAmPost_es) June 2, 2025