Con una ceremonia programada para este viernes 4 de julio en Washington, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmará su nuevo paquete fiscal y presupuestario, al que ha calificado como su “gran y hermoso proyecto de ley”. El acto oficial se llevará a cabo a las 17:00 hora local y contará con la presencia de invitados simbólicos, como los pilotos que participaron recientemente en el bombardeo contra instalaciones nucleares en Irán.
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La firma de la legislación coincide con las celebraciones por el Día de la Independencia, en una señal clara de intención política. Según voceros de la Casa Blanca, el gobierno busca proyectar a Trump como un líder que cumple promesas, especialmente en la antesala del año electoral 2026, cuando se celebrarán elecciones de medio mandato.
UNA VOTACIÓN AJUSTADA Y DIVIDIDA
El plan fue aprobado por la Cámara de Representantes con una estrecha mayoría: 218 votos a favor frente a 214 en contra. Ningún demócrata lo respaldó y dos republicanos —Thomas Massie (Kentucky) y Brian Fitzpatrick (Pensilvania)— se sumaron a la oposición. El Senado dio su aprobación final el 1 de julio gracias al voto de desempate del vicepresidente JD Vance, reflejando la profunda polarización del Congreso frente a este proyecto.
“El presidente quería firmarlo antes del 4 de julio, y presionó fuertemente para lograrlo”, indicó Karoline Leavitt, portavoz de la Casa Blanca, quien también calificó el acto como “una ceremonia gran y hermosa”.
RECORTES SOCIALES Y AUMENTOS EN DEFENSA
El nuevo plan busca extender permanentemente las reducciones fiscales implementadas durante el primer mandato de Trump (2017–2021), originalmente diseñadas para expirar en los próximos años. A la vez, contempla significativos recortes en programas sociales como Medicaid, lo que ha generado alarma entre sectores más moderados del Partido Republicano.
En contraste, la legislación incrementa el gasto en defensa y seguridad fronteriza, prioridades que Trump ha enfatizado durante su segundo mandato. La oposición demócrata denunció que el proyecto beneficia principalmente a los sectores de mayores ingresos y amenaza el acceso a salud de millones de personas, mientras reduce fondos destinados a servicios sociales.
TENSIÓN POLÍTICA EN MEDIO DE LAS CELEBRACIONES
Durante un acto previo en Des Moines, Iowa, Trump celebró la aprobación del proyecto como un logro central de su gobierno: “No podría haber mejor regalo de cumpleaños para Estados Unidos que la fenomenal victoria que logramos hace apenas unas horas”, declaró. También aprovechó la ocasión para atacar a los legisladores demócratas: “No votaron por esto solo porque odian a Trump, pero yo también los odio… No los soporto porque realmente creo que odian nuestro país”.
Este tipo de declaraciones volvió a encender las críticas por el tono beligerante del mandatario, en contraste con el espíritu unitario que suele rodear la conmemoración del Día de la Independencia. Aun así, el oficialismo busca capitalizar la firma del plan como una victoria legislativa clave del año.
RIESGOS FISCALES Y CONSECUENCIAS POLÍTICAS
Expertos en política fiscal han advertido sobre el impacto que esta legislación podría tener en el déficit federal. Si bien los recortes sociales alivian parte del gasto, las nuevas rebajas tributarias y el aumento del presupuesto militar podrían presionar las finanzas públicas en el mediano plazo.
A menos de un año de las elecciones legislativas, la Casa Blanca apuesta a que esta ley fortalezca la imagen de Trump como un presidente que cumple promesas y lidera con determinación, aunque el precio político y económico de esa estrategia está aún por verse.
VICTORY: The One Big Beautiful Bill Passes U.S. Congress, Heads to President Trump’s Desk 🇺🇸🎉 pic.twitter.com/d1nbOlL21G
— The White House (@WhiteHouse) July 3, 2025
