Rusia ejecutó la madrugada de este viernes uno de los ataques más intensos desde el inicio de la guerra, bombardeando Kiev con 430 drones y 18 misiles, en una ofensiva que dejó cuatro personas muertas y decenas de heridos, incluidos niños, una mujer embarazada y residentes atrapados entre escombros en distintos distritos de la capital ucraniana.
El presidente Volodymyr Zelensky calificó el ataque como “cruel” y llamó a los aliados occidentales a endurecer las sanciones contra Moscú, afirmando que solo así podrán detenerse las ofensivas deliberadas contra población civil. “Sabemos de decenas de heridos… lamentablemente, cuatro personas han muerto”, escribió en X.
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DAÑOS MASIVOS EN NUEVE DISTRITOS DE KYIV
Autoridades ucranianas informaron que, aunque la Fuerza Aérea logró derribar la mayoría de los proyectiles, los restos de drones y misiles provocaron incendios y destrozos en edificios residenciales de gran altura, una escuela, un centro médico y dependencias administrativas.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, confirmó 29 heridos, entre ellos dos niños. Una mujer embarazada debió ser atendida en un hospital tras resultar lesionada por la onda expansiva.
Testimonios recogidos en terreno describen escenas de pánico: Anastasia, de 29 años, relató el caos al momento del impacto. “No sabes qué hacer primero: salvarte, proteger a tu hijo o correr a ayudar a los que gritaban pidiendo auxilio”, dijo.
Las llamas avanzaron por varios puntos de la ciudad y dañaron el sistema de calefacción urbana, aunque las cuadrillas lograron restablecer el servicio durante la mañana.. También se reportaron apagones parciales en las regiones de Kiev, Odesa y Donetsk.
Además, Zelenski informó que restos de un misil ruso Iskander impactaron la embajada de Azerbaiyán en la capital.
UCRANIA RESPONDE: MISILES “LARGO NEPTUNO” Y ATAQUES CON DRONES
A la ofensiva nocturna, Kiev respondió con ataques de largo alcance. Zelensky confirmó que Ucrania lanzó misiles de crucero “Largo Neptuno” contra objetivos en territorio ruso, asegurando que estos ataques están volviéndose “cada vez más efectivos”.
Simultáneamente, drones ucranianos alcanzaron infraestructura petrolera crítica en Rusia, causando la suspensión total de las exportaciones de petróleo en el estratégico puerto de Novorossiysk, en el Mar Negro.
ATAQUE PARALIZA EXPORTACIONES DE PETRÓLEO EN NOVOROSSIYSK
Según fuentes de la industria citadas por Reuters, el ataque —uno de los mayores contra infraestructura energética rusa en meses— provocó incendios en la terminal petrolera de Sheskharis, daños en edificios residenciales y en un buque atracado, donde tres tripulantes resultaron heridos.
Las operaciones del Consorcio del Oleoducto del Caspio y de la empresa estatal Transneft también fueron suspendidas temporalmente.
Los mercados reaccionaron de inmediato: el precio del petróleo subió casi un 2% debido a temores sobre el suministro, aunque luego moderó su alza.
El gobernador de la región de Krasnodar, Veniamin Kondratyev, informó que más de 170 personas y 50 equipos trabajaron durante la noche para controlar incendios y asistir a la población. “Novorossiysk fue la más afectada”, afirmó en redes sociales.
ESCALADA EN VÍSPERA DE DECISIONES POLÍTICAS CLAVE EN EL MUNDO
La cadena de ataques ocurre en un contexto de marcada tensión internacional, mientras Ucrania insiste en golpear las refinerías, oleoductos y terminales portuarias que constituyen la principal fuente de ingresos de guerra del Kremlin.
En paralelo, los países occidentales evalúan nuevos paquetes de ayuda militar y sanciones financieras, en momentos en que crece la presión para frenar los bombardeos sobre civiles en Kyiv y otras ciudades.
combinado: según los informes, se utilizaron misiles de crucero y balísticos, incluyendo «Kinzhali» e «Iskander», junto con un uso masivo de drones de ataque.
Los principales golpes se dirigieron al complejo energético y militar-industrial. Como resultado del ataque a Kiev,
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