En una reciente sesión de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en La Haya, el representante del Ministerio de Exteriores de China, Ma Xinmin, presentó la postura de su país respecto a la situación entre Palestina e Israel.
Según Ma Xinmin, «el uso de la fuerza por parte de Palestina es un derecho inalienable en su lucha por la autodeterminación y para establecer un Estado independiente».
Ante la Corte, el Gobierno chino hizo hincapié en su apoyo constante a la causa palestina y señaló la falta de implementación efectiva de las resoluciones de la ONU para una solución de dos Estados.
Citó ejemplos históricos de pueblos que lograron independizarse tras la Segunda Guerra Mundial, argumentando que estas situaciones respaldan el derecho a la lucha armada de los pueblos bajo dominación colonial o ocupación extranjera, tal como se reconoce en varias resoluciones de la ONU.
Corte Internacional de Justicia
Las audiencias de la CIJ se centran en analizar las consecuencias legales de las políticas y prácticas de Israel en los territorios palestinos ocupados, incluyendo Jerusalén Este.
Ante esta instancia, China criticó las acciones de Israel, calificándolas como opresivas y un impedimento para el ejercicio del derecho de autodeterminación palestino.
Adicionalmente, Ma Xinmin destacó la ilegalidad, bajo el derecho internacional, de usar la fuerza para ocupar y mantener territorios
En su declaración, China señaló la responsabilidad de la ONU en la cuestión palestina, describiéndola como un asunto que trasciende lo bilateral y tiene implicaciones directas en la paz y la seguridad internacional.
Finalmente, China alentó a Israel y Palestina a trabajar en conjunto hacia una solución pacífica y negociada, promoviendo la coexistencia armoniosa de ambos pueblos.
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