El Presidente Gabriel Boric se refirió a la tensión entre el gobierno y la alcaldesa de Santiago, Irací Hassler (PC), debido a su reciente anuncio sobre la construcción de una cárcel de alta seguridad en la comuna.
Hassler ha expresado su oposición a esta medida, argumentando que: «Aquí no podemos tener una zona de sacrificio para la delincuencia y el crimen organizado».
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Boric indicó que está dispuesto a considerar otras alternativas, señalando que: «Hay argumentos que son muy atendibles en un sentido y en otro. Yo, frente a decisiones de políticas públicas que además tienen un efecto de largo plazo, siempre estoy disponible a escuchar otras voces y si eventualmente existen mejores alternativas que cumplan con los requisitos que tenemos hoy día para enfrentar el crimen organizado, poder evaluarlas».
OPOSICIÓN
Posteriormente, un grupo de diputados de oposición criticó esta reconsideración, sugiriendo que podría ser una maniobra política para aumentar la aprobación de Hassler antes de las elecciones municipales de octubre. El diputado Jorge Durán (RN) afirmó que: «El gobierno realmente no tiene nada claro. Primero, mantuvieron en secreto la ubicación de esta cárcel, luego se dijo que iba a ser una ampliación de Santiago 1, ubicado en la misma comuna, y ahora el Presidente dice que se abrió a la posibilidad de construirla en otro lugar».
El diputado Roberto Arroyo (PSC) calificó la situación como una estrategia para beneficiar a Hassler y desviar el debate de otros problemas del país. La diputada Karen Medina (PDG) instó al Ejecutivo a no utilizar este tema como estrategia política ya buscar soluciones viables y alcanzables a corto plazo.
