Consejo de Seguridad de la ONU emite resolución por ataques en el mar Rojo. La resolución condena de manera enérgica los ataques de los hutíes contra barcos en el mar Rojo, que se iniciaron el pasado 19 de noviembre.
La resolución, elaborada por Estados Unidos y Japón, exige el cese inmediato de estos ataques que afectan el comercio internacional y socavan la paz y seguridad en la región.
El escrito destaca al menos dos docenas de ataques a buques mercantes y comerciales desde la mencionada fecha, incluyendo la toma del Galaxy Leader y la retención de sus 25 tripulantes por parte de los hutíes.
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El Consejo reafirma el respeto al Derecho internacional y reconoce el derecho de los Estados miembros a defender sus buques contra estos ataques.
La situación en el mar Rojo ha empeorado desde el inicio del conflicto entre Israel y Hamás el 7 de octubre, con los hutíes intensificando los ataques para obstaculizar el tráfico marítimo internacional, expresando solidaridad con los palestinos de Gaza.
12% del comercio mundial transita por la zona
Estados Unidos lideró en diciembre la formación de una coalición internacional para proteger el tráfico marítimo en esta zona estratégica, que representa el 12% del comercio mundial, aunque esta acción fue criticada por Rusia.
La resolución también destaca las violaciones «a gran escala» del embargo de armas contra los hutíes y condena el suministro de armas a estos rebeldes, cercanos a Irán.
Expertos señalan que los hutíes están fortaleciendo sus capacidades militares en violación del embargo.
La resolución llama a abordar las causas subyacentes de la situación, incluidos los conflictos que contribuyen a las tensiones regionales.
Rusia y China se abstuvieron de votar
La resolución fue aprobada con 11 votos a favor y cuatro abstenciones (Rusia, China, Argelia, Mozambique). Rusia, cuyas enmiendas fueron rechazadas, buscaba vincular específicamente el conflicto en la Franja de Gaza como factor de las tensiones.
Sin embargo, Estados Unidos argumentó que esto podría legitimar violaciones del derecho internacional y criticó el respaldo financiero y material de Irán a los hutíes.
La ONU expresó preocupación por la situación en el mar Rojo, destacando los riesgos para el comercio mundial, el medio ambiente y la posibilidad de una escalada en el conflicto en Medio Oriente.
