La gira de Gabriel Boric por Europa no ha sido un viaje libre de polémicas. Desde que tomó la decisión de irse, entre medio del «Caso Convenios», la oposición se ha manifestado en contra. Llegando ya a Europa, el Presidente protagonizó dos hechos que aumentaron el descontento.
Una de ellas es la medalla que le entregó el Mandatario al juez Baltasar Garzón. La medida fue repudiada por diversos sectores del país que recordaron el momento en el que Garzón se manifestó a favor de Bolivia en la demanda que realizó en La Haya, el hecho de que fue condenado a 11 años de inhabilitación, y que fue él quien realizó la orden de captura de Augusto Pinochet.
Sobre la cuestionada decisión de entregar la medalla, el Mandatario señaló que «el reconocimiento al juez Baltasar Garzón es producto del trabajo que él ha hecho en contra de la impunidad en materia global, y en particular en el caso que todo conocemos del juicio a Pinochet y no por otras gestiones que él haya realizado como jurista».
El otro hecho que ha sido altamente cuestionado por la oposición, fue el llamado que hizo Grabiel Boric a que todos los partidos políticos firmaran una declaración en conjunto por la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado. Para varios, la convocatoria se traduce en una imposición histórica por parte del Presidente.
“Acá hay hechos que son claros y conocidos por todos: en Chile, el 11 de septiembre de 1973 se realizó un golpe de Estado que terminó con la democracia y dio paso a una dictadura brutal y asesina de 17 años ” señaló Gabriel Boric, junto a ello enfatizó que » nada, pero absolutamente nada, justifica violar los derechos humanos de nuestros adversarios políticos, de quien piensa distinto, de cualquier persona en nuestra patria».
