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Expertos comparten las razones comunes de la tos nocturna y cómo prevenirla

Cristian Navarro H.

Si la tos persiste durante la noche, es probable que se sienta frustrado, fatigado y se pregunte cómo detenerla.

Los expertos comparten las razones comunes de la tos nocturna y cómo prevenirla.

Cuando se trata de interrupciones del sueño, la tos nocturna es una de las más molestas.

Si la tos persiste durante la noche, es probable que se sienta frustrado, fatigado y se pregunte cómo detenerla.

El Dr. Daniel Landau, médico certificado de Carolina del Sur y colaborador del Centro de Mesotelioma, comparte algunas razones comunes para esta afección.

Razones detrás de la tos nocturna

Según los expertos, varios factores pueden contribuir a la tos nocturna. Como señaló Landau, a veces la causa es tan simple como la gravedad. «Cuando estamos erguidos, tendemos a retener sustancias dentro del estómago. Pero al acostarnos, el ácido puede subir hacia el esófago», explicó.

Esto puede irritar las cuerdas vocales y la laringe, desencadenando la tos. «A veces, algo tan simple como dormir un poco más erguido o tomar medicamentos bloqueadores de ácido puede ayudar con esto», sugiere Landau.

Gravedad: Al acostarnos, el ácido del estómago puede subir hacia el esófago, irritando las cuerdas vocales y la laringe. Dormir un poco más erguido o tomar medicamentos bloqueadores de ácido puede ayudar.
Goteo posnasal: Al acostarnos, el goteo nasal se acumula en la parte posterior de la garganta, provocando tos.
Asma variante con tos: Esta forma de asma se manifiesta más durante la noche. El tratamiento para el asma puede ayudar.
Resfriados y alergias: También pueden contribuir a la tos nocturna.
Cáncer: En casos menos comunes, la tos nocturna puede ser un síntoma temprano de cáncer de pulmón o de la zona de la cabeza y el cuello

Tratamiento y prevención de la tos nocturna

Para abordar la tos nocturna, mantenerse hidratado es clave, ya que mantiene las vías respiratorias húmedas y ayuda a aflojar la mucosidad. Además, agregar humedad al aire con un humidificador o tomar una ducha de vapor puede ayudar a calmar las vías respiratorias y aflojar la mucosidad.

Elevar la cabeza con almohadas adicionales puede ayudar con el goteo posnasal y el reflujo ácido.

La miel puede ser útil para aliviar el dolor de garganta y prevenir la tos.

Los remedios de venta libre, como los antihistamínicos o los supresores de la tos, pueden brindar alivio, pero es importante hablar con un médico antes de tomarlos, especialmente si la tos es severa.

Cuándo buscar atención médica

Si la tos nocturna persiste durante más de tres semanas o viene acompañada de otros síntomas preocupantes como fiebre, dolor en el pecho o dificultad para respirar, es importante comunicarse con un médico para obtener asesoramiento personalizado.

Además, realizar chequeos regulares con su médico es fundamental para asegurarse de que no haya ninguna preocupación más grave relacionada con la tos nocturna.

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