Internacional

Gobierno de Macron llama a no generalizar en la institución, crimen cometido por un policía

Santiago, Chile.

Fernando Moya L.

Aunque bajó la cantidad de los disturbios estos aumentaron en violencia

Agencias

El portavoz del Gobierno de Francia, Olivier Véran, se mostró en contra este domingo de hacer generalizaciones sobre la policía gala a raíz del asesinato de un joven en un control de carreteras y aseguró que donde hay abusos la Justicia lo investiga.

«Atención a no hacer generalizaciones a partir de una situación particular. Ese es el mensaje, yo creo, que nuestras fuerzas de seguridad que están movilizadas sobre el terreno necesitan oír», dijo Véran en una entrevista en la cadena pública FranceInfo.

También se refirió sobre el uso excesivo de la fuerza por parte de los cuerpos de seguridad, especialmente desde un cambio legal que amplió los usos justificados de las armas en 2017, el portavoz recalcó que «allá donde hubo fallos, allá donde fue excesivo, allá donde fue inadecuado, hay una investigación de la Inspección General y la justicia está ahí».

Sobre la muerte de Nahel, el menor de ascendencia árabe que murió por un disparo policial el pasado martes en Nanterre, Véran remarcó que «evidentemente es un drama humano que necesita una respuesta de la Justicia».

Véran también hizo un repaso de la situación en el país tras estas cinco noches consecutivas de disturbios -mayoritariamente protagonizados por jóvenes, incluso de hasta 13 años- y sobre las condiciones de desigualdad y de falta de oportunidades en muchos barrios populares que han funcionado como caldo de cultivo para los hechos registrados.

En ese sentido, defendió las medidas tomadas por Emmanuel Macron en los últimos cinco años y subrayó: «No entiendo cómo niños de 12 años pueden estar a las 3 de la madrugada en medio de una ciudad, muy lejos de casa, con una barra metálica en las manos».

LANZAN AUTO EN LLAMAS CONTRA CASA DE UN ALCALDE

La primera ministra, Élisabeth Borne, y el ministro de Interior, Gérald Darmanin, se desplazaron hasta la localidad de L’Haÿ-les-Roses (en la periferia sur de París), cuyo alcalde, Vincent Jeanbrun, sufrió esta noche un grave ataque en su residencia familiar en el contexto de los disturbios.

Mientras él trabajaba en el municipio, individuos a los que se busca por intento de asesinato lanzaron un auto en llamas contra la casa, en la que se encontraban sus hijos de 5 y 7 años y su esposa. Uno de los niños tuvo que ser atendido por lesiones, al igual que la madre, con una fractura en la pierna.

Durante la pasada noche, al menos 719 personas fueron detenidas, 45 policías resultaron heridos, hubo 871 incendios en la vía pública y desperfectos en 74 edificios, de acuerdo al último balance oficial disponible.

Pese a lo abultado aún de las cifras, el Ministerio de Interior ha confirmado que esta última noche fue «más tranquila» que las precedentes.

 

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