La Fiscalía Nacional publicó los resultados de su informe anual sobre homicidios en Chile, dando a conocer que durante 2023 los homicidios presentaron una leve baja, rompiendo la tendencia al alza de los últimos años.
En concreto, de acuerdo a los datos presentados y analizados para el 2023, se reveló la existencia de un “leve descenso” en casos (-4%), delitos (-4%), víctimas (-2%) e imputados (-6%). Si bien es cierto se recalca que las bajas no se consideran estadísticamente relevantes, sí es necesario señalar que durante el año pasado “se produjo una inflexión en el alza de dichos indicadores, los cuales habían sufrido aumentos significativos al comparar los años 2021 y 2022″.
El ente persecutor hizo hincapié en que es importante tener atención en la profundización de la diferencia entre los homicidios que se consumaron y aquellos que no. En la serie histórica, se ha observado que “la diferencia entre los homicidios según su grado de desarrollo se ha mantenido relativamente estable, moviéndose los consumados entre el 40 y 44%”.
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Sin embargo, desde 2021 se ha observado una “notoria diferencia”, ya que los no consumados se elevaron a 67% en 2021, a 73% en 2022 y a 74% en 2023. Respecto a este último año se registró la mayor diferencia y los homicidios consumados alcanzaron un 26%, un punto porcentual menor que el año inmediatamente anterior.
Los indicadores redundan en una disminución en la tasa de víctimas de homicidios: el 2023 se alcanzó la cifra de 6,3 víctimas de homicidio por cada 100 mil habitantes, lo que implica una baja de un 6% respecto al 2022.
Los datos se dan a conocer luego de un duro fin de semana en el país en materia de seguridad. Y es que durante las últimas jornadas ocurrieron 18 homicidios, 8 de ellos tuvieron lugar en la Región Metropolitana.
Crimen organizado
En su informe, la Fiscalía destaca que históricamente los homicidios en Chile se han caracterizado por ser interpersonales y con “escasos grados de planificación, perpetrados en contextos de disputas familiares, vecinales, domésticas o en contexto de riña”.
Sin embargo, en los últimos años se ha dado cuenta de un aumento progresivo en los homicidios asociados al crimen organizado. Ello implica que dicho homicidio tiene mayores niveles de planificación y, además, un efecto “simbólico-utilitario detrás, que dice relación con control territorial o ajuste de cuentas entre miembros de una banda o entre bandas contrarias”.
De esa manera, a nivel nacional, durante 2023 el 17% -en promedio- de las víctimas de homicidios se puede asociar al crimen organizado.
Las Fiscalías regionales de Tarapacá, Arica y Parinacota, Antofagasta, Coquimbo, Metropolitana Sur, Ñuble y Aysén superan el promedio nacional de homicidios consumados en contexto de crimen organizado.
Mientras que a nivel comunal, las comunas que concentran mayor cantidad de víctimas asociadas a criminalidad organizada son: Quilpué (75%), Lampa (37%), Pudahuel (32%), Arica y Parinacota (31%), Alto Hospicio (29%), Recoleta (25%), Antofagasta (22%), Viña del Mar (21%) y Santiago (17%).
Asimismo, destaca la participación de ciudadanos extranjeros en calidad de víctimas: un 30% de ellos se puede asociar a contextos de crimen organizado. Por su parte, del total de víctimas chilenas, solo el 14% se puede asociar a dicho fenómeno.
La situación en regiones y comunas
A nivel regional, Arica y Parinacota registra la tasa más alta de víctimas de homicidios consumados. De todos modos, se observa una baja relevante (30%) si se compara con 2022.
Sin embargo, gran parte de las regiones han disminuido sus tasas, excluyendo a Maule, O’Higgins, Aysén y Magallanes, además de las comunas de las Fiscalías Regionales Metropolitanas Sur -que mantienen su tasa- y Occidente y Oriente -que aumentaron sus tasas respecto a 2022-.
En cuanto a distribución territorial, el Ministerio Público indicó que las víctimas se concentran principalmente en la Región Metropolitana. En esa línea, se subrayó que las cinco comunas con mayor cantidad de víctimas de homicidio se repiten al analizar los datos de 2022 y 2023: Santiago, Puente Alto, San Bernardo, Viña del Mar y Antofagasta.
Dichas comunas sufrieron un alza en las víctimas de homicidio, a excepción de Santiago, que registró la misma cantidad en 2022 y 2023.
Imputados conocidos o desconocidos
En este punto, la Fiscalía señaló que desde 2016 a 2022 se observó que la incidencia de imputados desconocidos ha ido en un aumento progresivo, alcanzado un peak el 2022, con un 42%.
De todos modos, el 2023 se registró un descenso en el imputado desconocido, alcanzando un 39%, “lo que da cuenta de una mejora en la capacidad del sistema de lograr la identificación de los partícipes en estos delitos”.
