Internacional

El caos arancelario de Trump sacude el comercio global

Por Allan Santander

Periodista

Trump
Donald Trump, presidente de Estados Unidos (Foto: AP)
La incertidumbre sigue dominando la economía global. Trump dispara los aranceles a China al 145%, mientras ofrece una tregua de 90 días a otros países. ¿Cómo quedan finalmente los aranceles?

Donald Trump no deja de sorprender al mundo con su manejo errático de la política comercial. El pasado miércoles, Estados Unidos subió los aranceles a China al 125%, una medida sin precedentes que sacude al gigante asiático y a las economías de todo el mundo. Hasta ese momento, las tarifas oscilaban entre el 20% y el 84%, dependiendo de la categoría de los productos, pero con este golpe, la guerra comercial entra en una nueva fase.

A pesar de esta escalada, Trump ha dejado claro que aún está dispuesto a negociar con Xi Jinping. Sin embargo, la política de “aranceles primero, acuerdos después” parece dominar la agenda de su administración.

Cuando se le preguntó sobre posibles excepciones para algunas empresas, Trump respondió que las decisiones se tomarían “más por instinto que por estrategia”. Así, el futuro del comercio internacional se mantiene en una cuerda floja.

Y así se confirmó hoy. Durante la tarde de este jueves, se informó que ahora los aranceles de China iban a aumentar hasta un 145%. También, incrementó los aranceles sobre aquellos productos con valor menor a US$800 a un 120% desde el 02 de mayo.

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EL RESPIRO TEMPORAL

Aunque el presidente estadounidense decide aumentar los impuestos a los productos chinos, también otorga una pausa de 90 días para los países que enfrentan aranceles más altos que el 10%.

Entre estos se encuentran naciones como Japón, Vietnam y Corea del Sur, que en su momento fueron gravadas con tarifas de hasta el 46%. Ahora, todos estos países verán su tasa reducida a un 10% universal, que será el mismo tipo de arancel para la mayoría de los países.

Sin embargo, los cambios no son tan simples. La Unión Europea ya había comenzado a tomar represalias por los aranceles a los metales, pero tomaron la decisión de congelar la medida y buscar negociaciones con Washington.

SECTORES CLAVES

En cuanto a los sectores más afectados, el acero y el aluminio continúan sujetos a aranceles del 25%, los cuales se mantienen sin alteraciones. Esta medida, implementada en marzo, afecta a todos los países, incluidos México y Canadá, con los que Trump firmó el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC), ahora en disputa.

Por otro lado, los aranceles sobre los vehículos importados también permanecen sin cambios. Desde el 3 de abril, los automóviles y sus componentes clave, como motores, transmisiones y piezas eléctricas, están sujetos a una tarifa del 25%.

Además, la Casa Blanca dejó abierta la posibilidad de expandir los aranceles a más piezas en el futuro. La pausa no afecta a estos productos, lo que deja claro que la industria automotriz seguirá siendo un campo de batalla en esta guerra comercial.

¿QUÉ PASA CON CHILE?

Pero Europa no son lo únicos. Chile está en el radar de Trump, pero las noticias son mixtas. El ministro de Hacienda, Mario Marcel, aclaró que el país sigue bajo el régimen del 10% de arancel impuesto por el presidente de EE. UU.

Según confirmó el secretario de Estado, el anuncio dado por el mandatario fue confuso y careció de detalles claros. Cabe mencionar que las últimas decisiones comerciales fueron anunciadas por su perfil de Truth Social.

A pesar de la incertidumbre, el jefe de Hacienda destacó que la pausa anunciada por Trump podría ofrecer algo de alivio a corto plazo, aunque, como él mismo advirtió, «la incertidumbre va a continuar».

Las bolsas reaccionaron de manera positiva tras el anuncio de Trump, con un incremento en los valores bursátiles y una caída del dólar en Chile. El mercado se siente algo más aliviado, pero las expectativas siguen siendo bajistas debido a la incertidumbre que rodea la guerra comercial. Los analistas coinciden en que, a pesar del pequeño respiro, el futuro inmediato sigue siendo impredecible.

LA INCÓGNITA DEL FUTURO

Trump ha dejado abierta la puerta a nuevos cambios. Algunas empresas podrían recibir exenciones durante este periodo de pausa, pero la decisión dependerá del “instinto” del presidente, como él mismo lo expresó.

A través de sus frecuentes declaraciones por Redes Sociales, Trump deja entrever que, para él, las políticas comerciales son más una cuestión de intuición que de estrategia bien definida.

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