Este jueves por la mañana, veinte miembros de la misión diplomática chilena en Venezuela aterrizaron en el Aeropuerto de Santiago después de que el régimen de Nicolás Maduro ordenara su retirada.
Esta medida también incluyó el cierre indefinido de la embajada venezolana en Providencia, y se produjo tras la decisión del presidente Gabriel Boric de no reconocer la proclamación de Maduro.
Boric pidió al Consejo Nacional Electoral que hiciera públicas las actas oficiales, que aún no se han divulgado a cuatro días de las elecciones.
EXPULSIÓN INMEDIATA
En respuesta, Nicolás Maduro ordenó la expulsión inmediata del embajador Jaime Gazmuri y del personal diplomático chileno, así como de las misiones diplomáticas de Argentina, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay, países que no han validado los resultados electorales.
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Esta mañana llegaron al país varios funcionarios, incluyendo a Ismael Castillo, cónsul en Puerto Ordaz, y al director de personal de Cancillería, Iván Favereau.
CAROLINA TOHÁ
Tras su llegada, la ministra del Interior, Carolina Tohá, expresó su preocupación por la continuidad de los servicios consulares y destacó que, aunque Chile tomará las medidas correspondientes para el retorno de sus delegaciones diplomáticas, el consulado continuará operando con personal local en Venezuela.
Además, se espera que se pueda implementar una solución similar en Chile para la comunidad venezolana. Finalmente, Tohá sugirió la posibilidad de que un tercer país facilite la prestación de estos servicios.
El sábado se espera la llegada de otros seis funcionarios, incluyendo al embajador Gazmuri y al cónsul general Roberto Araos Sánchez.
