El alcalde de Santiago, Mario Desbordes, expresó su apoyo al uso de pistolas taser por parte de Carabineros en casos de violencia intrafamiliar (VIF) dentro de la Región Metropolitana.
Sin embargo, cuestionó la necesidad de realizar un piloto previo a su implementación, asegurando que “yo no sé por qué es necesario hacer un periodo de prueba de una pistola eléctrica que está probada y es utilizada por las policías de Europa y Estados Unidos hace décadas”, criticó el jefe comunal.
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Desbordes también sugirió que la decisión de realizar una fase experimental con las pistolas taser responde a presiones políticas, señalando al Frente Amplio (FA) y al Partido Comunista (PC) como sectores opuestos al uso de estos dispositivos de control intermedio.
“Me da la idea de que aquí hay una presión de un sector que ha sido contrario al uso de estos elementos intermedios, que es el Frente Amplio y el PC. Porque, de otra manera, yo no logro entender que tengamos que hacer pruebas”, sostuvo.
Por otro lado, el alcalde abordó el reciente ataque a un guardia de seguridad del Hospital Clínico de la Universidad Católica, quien fue apuñalado en el pecho durante un asalto.
Desbordes calificó el hecho como “gravísimo” y destacó que, aunque se han registrado robos en la zona, no se habían reportado agresiones de tal magnitud en el último tiempo.
“Vamos a trabajar en conjunto con Carabineros. Vamos a presentar querellas, pero no las testimoniales”, afirmó, dejando en claro que la municipalidad tomará medidas legales para enfrentar la situación de inseguridad en la comuna.
