Uno de los últimos datos que se tuvo sobre Anahí Espíndola antes de desaparecer es que el jueves 4 de enero fue al gimnasio Seven, ubicado en Bellavista 237, en Viña del Mar. Eso al administrador del recinto le pareció raro.
“Ella no venía mucho de noche”, dijo Renato Villalón en CHV.
“Según sus amigas, ella venía más temprano, en la tarde. Les llamó un poco la atención que vino a esa hora”, agregó.
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LA RUTA DE ANAHÍ
A eso de las 23:01 horas Anahí Espíndola dejó el recinto deportivo y caminó hacia Puente Casino, no sin antes interactuar con una mujer desconocida.
Villalón complementó que su hora de salida del gimnasio “es normal para las personas que vienen” de noche.
La muerte de la joven fue confirmada el martes por Fiscalía y el Servicio Médico Legal tras permanecer desaparecidavor más de una semana. Su cuerpo apareció en unos roqueríos.
Persisten las interrogantes respecto de las cosas que hizo antes de perderse su rastro.
LA MUJER DE BOLSO AMARILLO
Tras salir del gimnasio Anahí interactuó con una mujer de polera blanca y bolso amarillo en las calles en Von Schroeder y Arlegui, según el registro de varios videos de cámaras de tránsito.
“Ella es una persona que está siendo requerida para que preste declaración en cuanto a qué fue lo que conversaron en ese momento”, puntualizó el ex PDI Christian Jabbar.
Ella podría ser la última en ver a la joven con vida y subsiste la interrogante de qué sería lo que le entregó durante el diálogo y por qué.
LA FOTO MISTERIOSA
En el marco de la búsqueda de Anahí su madre reveló que la joven le envió una foto de sus piernas mojadas. Esto habría dado cuenta que se encontraba en la playa, por motivos aún desconocidos.
Ahora las autoridades enfocan sus pericias para establecer la causa de muerte de la muchacha de 22 años, a fin de aclarar si se trató de un accidente o si tuvo la intervención de terceros.
