Fue unánime: por 128 votos a favor, ninguno en contra y dos abstenciones la Cámara de Diputadas y Diputados despachó a ley el proyecto que restringe los funerales de alto riesgo en el país.
El martes 29 de octubre, por 35 sufragios aprobatorios, dos de rechazo y uno neutro, el Senado ya había aprobado la iniciativa y la despachó a la Cámara Baja para su tercer trámite.
Es parte de la agenda priorizada en materia de seguridad. Su objetivo es regular la realización de funerales en que existan circunstancias que permitan presumir, de forma fundamenta, que su realización representa un riesgo para la seguridad y el orden público.
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Entre mayo de 2019 y noviembre del año pasado hubo más de mil 800 de estas inhumaciones. Implicaron cierre de colegios y centros de atención médica, además de un amplio despliegue de efectivos policiales.
QUÉ DICE EL PROYECTO
El proyecto de ley reduce a 24 horas el plazo máximo para la realización de los funerales de alto riesgo.
Asimismo, dispone aplicar la máxima penalización cuando se incumplan normas y haya uso de armas y fuegos artificiales, consumo de alcohol y drogas, entre otros.
Los encargados de establecer el riesgo del funeral son las policías y Gendarmería, con evaluación de los antecedentes y características del fallecido. Su informe se entrega al delegado o delegada presidencial, que emite la resolución respectiva en base a esos antecedentes.
TOHÁ: HERRAMIENTAS QUE HOY NO EXISTEN
La ministra del Interior, Carolina Tohá, recalcó en el Congreso que “este proyecto no naturaliza los funerales narcos. Los sanciona”.
“Cuando se penaliza la violación o el robo, no se está naturalizando el robo, se está sancionando el robo. Cuando hay una realidad, se enfrenta con normas para dar cuenta de esa realidad», explicó.
«Y la realidad es que los narcos se mueren, como todas las personas. Y hoy día tienen los mismos derechos que cualquier ciudadano, ellos y su familia», agregó.
Especificó Tohá que hoy no hay herramientas legales para impedir un velorio de un día o que el cortejo pase por donde se antoje a los deudos.
«Eso cambia con esta ley. En lugar de 48 horas van a ser 24. Ya no va a haber lugar del velorio, directo desde el lugar de fallecimiento o el Servicio Médico Legal al cementerio. Lo que haya de velorio va a ser en el cementerio», detalló.
Además, «el recorrido tiene que ser visado por Carabineros. Ya no van a poder pasar por donde quieran. Lejos de naturalizar los incidentes que hay en este tipo de velorios, se agravan las sanciones si llegara a haberlos. Se entregan herramientas que hoy no existen”, destacó la secretaria de Estado.