El ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, afirmó que las clases suspendidas a raíz de las lluvias y el reciente sistema frontal que afectó al centro y sur del país deberán ser recuperadas en diciembre.
A su juicio, «no se justificó la suspensión general de clases», sino que se prefirió responder a la solicitud de cada sostenedor dependiendo de la realidad local.
En ese sentido, manifestó -en entrevista con 24 Horas- que aquellos establecimientos que no estén con actividades «se deberán recuperar seguramente al final del calendario escolar».
«Hemos tenido un calendario regular este año (…) Quizás la salida en diciembre se pueda alargar uno o dos días», aseveró.
Ávila enfatizó que «no hay una resistencia a la suspensión general, porque, tal como ha sucedido con los virus respiratorios, fuimos mirando las soluciones parciales y dependiendo de cada colegio».
«Para la reactivación escolar es fundamental no perder clases», añadió.
Asimismo, el titular de cartera cifró «entre 700 y 800 los establecimientos con algún tipo de afectación, ya sea goteras, filtraciones, inundaciones o daños totales».
Sin embargo, sentenció que la mayoría está ligado a inundaciones, cuyos niveles de daños se verán «a medida que el agua empiece a bajar».
