Dos aviones colombianos despegaron este lunes hacia Estados Unidos con el objetivo de repatriar a 110 ciudadanos deportados, en el marco de la reciente crisis diplomática desatada por la decisión del presidente Gustavo Petro de bloquear la llegada de dos aeronaves con migrantes hasta garantizar un trato digno para ellos.
El primer vuelo tuvo como destino San Diego (California), mientras que el segundo se dirigió a Houston (Texas).
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La Cancillería explicó a través de un comunicado que el Gobierno dispuso de «Un avión de la Fuerza Aérea Colombiana para que traiga de regreso a casa a 110 connacionales deportados desde Estados Unidos cumpliendo los protocolos establecidos para el retorno digno y con garantía de derechos a los connacionales que llegan en vuelos de deportación».
FUNCIONARIOS
A bordo de los aviones viajaron funcionarios de Migración Colombia y de la Cancillería, además de médico personal, para garantizar «El respeto a los derechos de los ciudadanos y hacer monitoreo médico en caso de ser necesario».
El Ministerio de Relaciones Exteriores adelantó que «Se espera que en los próximos días salga otro avión con el mismo objetivo».
Horas después, la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) confirmó en su cuenta de X el despegue de una «Segunda aeronave de la Fuerza Aérea Espacial, el FAC 1222 con destino a Houston, Texas, para continuar con la misión de repatriar a otro grupo de connacionales».
GUSTAVO PETRO
El domingo, el presidente Petro rechazó inicialmente la llegada de dos aviones enviados por Estados Unidos con deportados a bordo.
En su cuenta de X, expresó que «Un migrante no es un delincuente y debe ser tratado con la dignidad que un ser humano merece».
“Por eso hice devolver los aviones militares estadounidenses que venían con migrantes colombianos», señaló.
Según informes, Estados Unidos habría utilizado aeronaves militares para estas operaciones, transportando a los migrantes esposados, una práctica ya vista en vuelos similares dirigidos a Brasil.
TENSIONES
La posición de Petro llevó al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a ordenar un arancel del 25 % sobre los productos colombianos, anunciando que en el plazo de una semana esta tarifa subiría al 50 %, junto con otras restricciones de viaje y medidas migratorias.
En respuesta, Petro aplicó el principio de reciprocidad y dio instrucciones al ministro de Comercio, Industria y Turismo, Luis Carlos Reyes, para que «Elevar los aranceles de importaciones desde los EE.UU. en un 25 %».
Finalmente, la Casa Blanca anunció la resolución del conflicto con Colombia al confirmar que el Gobierno de Bogotá había aceptado «Todos los términos del presidente Trump» respecto a las repatriaciones.
Esto incluye «La aceptación sin restricciones de todos los ilegales extranjeros de Colombia retornados desde Estados Unidos, incluidos en aviones militares, sin limitaciones o retrasos».
GOBIERNO COLOMBIANO
Por su parte, el Gobierno colombiano indicó en un comunicado que el impasse con Estados Unidos había sido superado y reiteró su disposición de facilitar aviones propios para las repatriaciones, como ocurrió en este caso.
Cabe destacar que, en el último año, julio fue el mes con mayor número de vuelos de deportación recibidos por Colombia (17).
Entre noviembre y diciembre, las cifras también mostraron un ligero incremento, pasando de ocho vuelos en noviembre a 10 en diciembre.
