Las elecciones presidenciales en Uruguay se va al balotaje, ya que han dejado a Yamandú Orsi, candidato del Frente Amplio (FA), y Álvaro Delgado, del Partido Nacional (PN), en la carrera por la presidencia en una segunda vuelta que se celebrará el 24 de noviembre.
Con el 99,9% de los votos escrutados, Orsi lidera con el 43,9%, seguido por Delgado con el 26,7%. Este margen refleja una clara ventaja de Orsi, aunque aún insuficiente para asegurar el 50% requerido para evitar el balotaje. A partir de ahora, ambos candidatos intensificarán sus campañas.
CANDIDATO DEL FRENTE AMPLIO
Orsi, exintendente de Canelones, representa una postura progresista que ha captado la atención de la mayoría de los votantes en esta primera vuelta.
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Ha enfocado su campaña en mejorar la infraestructura social y la inclusión, proponiendo iniciativas como un programa de empleo juvenil, políticas de industrialización sostenibles y beneficios para pequeñas empresas en sectores clave como la bioeconomía y la tecnología.
Además, plantea una reforma en el sistema de transporte público para implementar una flota eléctrica que impulse la movilidad limpia.
PARTIDO NACIONAL
Por su parte, Delgado, exsecretario de la Presidencia, cuenta con el respaldo de la coalición gubernamental y se ha comprometido a mantener una política de austeridad fiscal.
Entre sus propuestas están la reducción del personal estatal y la mejora de la competitividad a través de la infraestructura y la transformación educativa.
En el ámbito social, ha indicado que buscará mejoras en el mercado laboral y promoverá la movilidad eléctrica tanto en el transporte público como privado, además de asegurar la estabilidad de servicios esenciales, como el agua potable, mediante proyectos de infraestructura hídrica.
EN LA BÚSQUEDA DE VOTOS
Ambos candidatos enfrentan el desafío de atraer a votantes de otras formaciones políticas. Andrés Ojeda, del Partido Colorado, que obtuvo el 16.1% de los votos, y Gustavo Selle, de Identidad Soberana, con el 2.7%, son algunas de las fuerzas cuyo respaldo podría inclinar la balanza.
Además, el reciente plebiscito sobre la reforma del sistema de jubilaciones, que no logró el apoyo necesario, marcó la agenda, demostrando la resistencia a cambios en la seguridad social, un tema de relevancia en esta elección.
El balotaje se presenta como una contienda estrecha, donde la unidad en los bloques ideológicos jugará un papel crucial.
Orsi apuesta a consolidar el retorno del FA tras cinco años de gobierno del PN, mientras Delgado apela a la coalición de derecha para asegurar la continuidad de su proyecto.
Ambos deberán persuadir a los uruguayos de que representan la estabilidad y el crecimiento que el país necesita para el próximo quinquenio.
*¡VA A ESTAR DE CHUPETE: DELGADO y ORSI pelearán el BALOTAJE!*
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— ZIN TV (@ZinTV_Uruguay) October 28, 2024
