Política

Sebastián Piñera sueña con una «Concertación de derecha» de Amarillos a Republicanos

Santiago, Chile.

Mario López M.

También habla sobre el lío de platas de ONG: ¿quién le entrega los recursos a una institución, una ONG recién creada, sin ninguna historia, y se los entrega en forma anticipada y sin ninguna garantía? Eso no es inexperiencia. Eso es corrupción o estupidez»

En una larga entrevista en La Tercera, el expresidente le pautea una hoja de ruta a la derecha en las próximas elecciones, para volver a La Moneda. “Una gran mayoría es la única forma de hacer cambios de forma seria, responsable y sustentable en el tiempo”, dijo.

No se guarda opiniones acerca del proceso constitucional, el rol de la oposición, la nueva Concertación de centro derecha a la que aspira, las reformas tributarias y el pacto fiscal, los líos de platas de las fundaciones y varias otras materias. Piñera, sigue siendo Piñera, aunque él lo niegue. Aquí, un resumen de sus principales ideas.

NO HAY TERCERA OPORTUNIDAD, DICE

Entusiasmado por los resultados de la encuesta CEP, donde registró un alza de su evaluación positiva en 10 puntos y una disminución de la evaluación negativa en 12 puntos, quiere volver a la palestra en materia política. Esa alza en la encuesta, la atribuye a que por fin la gente está haciendo una «revalorización de nuestro gobierno. El tiempo es un gran aliado de la verdad y ese clima tóxico que significó el octubrismo se ha ido disipando», asegura.

Se atribuye el acuerdo constitucional, que en realidad emanó del Congreso y que se vio obligado a firmarlo, como se reconoce desde todos los sectores, pero en su visión, es el padre del proceso constituyente»en la crisis de violencia escogimos el camino de la democracia, le propusimos al país, el martes 12 de noviembre de 2019, un gran acuerdo nacional por la paz, la justicia y una nueva Constitución», dice.

Insiste en que no quiere volver por una tercera oportunidad a La Moneda, pero siente que su «compromiso es contribuir a la unidad, al diálogo, a los buenos acuerdos en nuestro país… Los presidentes muchas veces se sienten solos. Recuerdo un Presidente que hablaba de La Moneda como la casa donde tanto se sufre. Y, sin embargo, todos quieren llegar. Así que uno siente a veces soledad, hubiera querido mayor apoyo, pero sumando y restando, creo que Chile Vamos fue un apoyo importante y leal con el gobierno».

UNA NUEVA CONCERTACIÓN PERO DE DERECHA

Asegura que, luego de pensar mucho, ha llegado a la conclusión que «que Chile Vamos debe pasar de ser una alianza electoral a una coalición política, porque queremos ser una buena oposición y porque también queremos ser una buena opción de gobierno a futuro. Y eso requiere mayor unidad, mayor coordinación, mayor institucionalidad, mayor planificación del trabajo, trabajo en equipo, esfuerzo».
«es muy importante que Chile Vamos busque crear una gran alianza por la libertad, la democracia, la justicia, el progreso, la paz».

Afirma que «Esa gran alianza tiene que representar a una gran mayoría, porque esa es la única forma de hacer cambios de forma seria, responsable y sustentable en el tiempo. Creo que Chile Vamos debe aspirar a buscar alianzas desde la derecha republicana hacia el centro, Amarillos, Demócratas y hacia la sociedad civil, los independientes. Y, además, creo que es muy importante que Chile Vamos se comprometa con hacer su mejor aporte para que podamos tener una nueva y buena Constitución. Siento que se han revalorizado las ideas de la centroderecha, las ideas de libertad, seguridad, orden, igualdad de oportunidades, el crecimiento, versus las ideas del octubrismo y del refundacionismo que estaban tan en boga hace algunos años», concluye.

Según su visión, es imprescindible para la derecha olvidar las diferencias y «buscar esa alianza, avanzar buscando hacia la derecha y hacia el centro. Para gobernar un país en forma fecunda, para hacer grandes transformaciones, necesitamos una alianza muy sólida. El camino es ponerse de acuerdo en un programa ambicioso, pero al mismo tiempo factible, porque eso es lo que motiva y entusiasma a un pueblo y a un país. Pero, además de eso, creo fundamental resolver los temas que nos dividen. Por ejemplo, los temas de candidaturas presidenciales. Propongo que nos pongamos de acuerdo de inmediato, que dentro de esa gran alianza va a haber una primaria, que es el método más democrático para escoger».

PRIMARIAS GANE QUIEN GANE

Eso, piensa, debe sumar a «José Antonio Kast, Evelyn Matthei, Ximena Rincón… Aspiraría a una alianza tan amplia como poder buscar hacia la derecha, que básicamente es el Partido Republicano, hacia el centro, Amarillos y Demócratas, el Partido de la Gente y hacia los ciudadanos, que es la sociedad civil, que es el actor más importante de cualquier alianza política».

También dice estar dispuesto a apoyar a Kast, si este gana eventualmente una primaria del sector: «La democracia es la democracia», señala.

Respecto al actual gobierno, luego de quejarse de cómo lo trató parte de la oposición a él, dice que ahora, «La actual oposición tiene que ser firme en la defensa de sus principios, valores y convicciones, pero tiene que ser siempre constructiva y buscar buenos acuerdos. Lo que ocurre a veces con el actual gobierno es que propone fórmulas que han fracasado en el mundo entero, como la reforma tributaria original o la reforma de pensiones original. Cuando hay malas propuestas, hay que oponerse, pero eso no significa no estar siempre abierto a contribuir para buscar buenos acuerdos. Por ejemplo, en materia constitucional».

EL ROL DE LA OPOSICIÓN Y JACKSON

Pide a la actual oposición que no repita los errores de la oposición a su gobierno, donde hubo «malos ejemplos, porque hizo nueve, 10 acusaciones constitucionales, y pedía la renuncia no de un ministro, sino de todo el gabinete o no aprobaban el presupuesto para Carabineros. Pero ese mal ejemplo no hay que repetirlo. Las acusaciones constitucionales deben ser utilizadas correctamente. Cuando se abusa de ellas se les hace mal a la democracia, a la institucionalidad y al país», expresa y, de paso, reconoce que no han sido bien usadas las acusaciones constitucionales por Chile Vamos, al menos «No todas».

Acerca del chantaje de la UDI que, para sentarse a conversar con el gobierno acerca de reformas, exije la salida del ministro Giorgio Jackson, Piñera reflexiona que «Después de haber sido Presidente dos veces, no me gusta que se pidan renuncias de los ministros, porque esa es una facultad exclusiva del Presidente. Pero al mismo tiempo creo que los presidentes tienen que tener el criterio y la amplitud para darse cuenta de que hay que privilegiar siempre, cuando uno nombra o destituye al ministro, el interés del país, el interés general, y no consideraciones de carácter más personal».

Para él, un ministro de Estado es contraproducente, cuando «ese ministro y el propio Presidente tienen que estar permanentemente dando explicaciones respecto de esa persona, ¿cierto?, es un problema», sostiene.

LAS REFORMAS

Reconoce que no hay voluntad en la derecha para apoyar la Reforma Previsional, pero que sí «Necesitamos un pacto fiscal, porque, como le decía antes, estamos avanzando en superar la crisis institucional con este Consejo Constitucional y espero que llegue a buen puerto, pero estamos empantanados en la crisis económico-social y no podemos acostumbrarnos a la mediocridad. Pero el pacto fiscal tiene que apuntar básicamente a enfrentar los problemas que hoy vivimos, cómo estimular y cómo potenciar el crecimiento, la creación de empleos, la mejora de los salarios, cómo aumentar la inversión que está cayendo permanentemente, la innovación, el emprendimiento, la productividad, cómo mejorar la eficacia y la probidad y la transparencia del gasto público, cómo modernizar el Estado y el empleo público. Esos son los grandes objetivos de un pacto social».

Aunque a reglón seguido asegura que «Creo que el pacto fiscal sigue estando muy centrado en aumentar los impuestos a los chilenos y en un momento de tanto despilfarro, corrupción y mal uso de recursos públicos, es muy poco oportuno hablar de querer quitarles más recursos a los chilenos».

LOS 50 AÑOS DEL GOLPE

Acerca de los 50 años del Golpe militar y el resurgimiento en la derecha de resabios que no solo reivindican el Golpe, sino que también la figura de Pinochet, dice que «Hay señales equívocas y preocupantes en ambos lados. Unos mitificando el gobierno de Allende y otros relativizando los valores de la democracia. Por eso es muy importante renovar y reforzar nuestro compromiso total con la democracia, con el Estado de Derecho, con la condena a la violencia, con el respeto a los derechos humanos».

«Está claro que hay distintas visiones y opiniones respecto del 11 de septiembre, al Golpe militar, lo que pasó antes o lo que pasó después. Pero donde no puede haber distintas visiones y opiniones es en nuestro compromiso total y absoluto con respetar la democracia y los derechos humanos, el Estado de Derecho y condenar y combatir la violencia», sostiene.

PROCESO CONSTITUCIONAL

Acerca del proceso llevado adelante por la Comisión Constitucional y las enmiendas y capítulos impuestos por los republicanos, cree que «el grave error que cometió la Convención Constitucional fue pretender imponer una mayoría sin ninguna sensibilidad por la minoría que estaba presente en esa Convención y sin ninguna sensibilidad por lo que pensaba la gente. Por eso es muy importante que hoy día la mayoría que existe en el Consejo Constitucional -por supuesto que es una mayoría que tiene derecho a expresarse y a buscar promover sus ideas, sus principios y sus valores-, pero tiene que tener mucha sensibilidad con lo que piensa la gente, el sentido común, la sabiduría popular», dice.

ve con preocupación que se transforme a la constitución en un programa de gobierno o se trate de legislar desde ella: «El trabajo de la Comisión de Expertos se hizo por unanimidad. Se pusieron de acuerdo en lo que pudieron ponerse de acuerdo. Una Constitución no es un programa de gobierno, no es un reglamento. Una Constitución, cierto, tiene que fijar los grandes principios, los grandes valores, garantizar los derechos y garantías de las personas, organizar el Estado. Y por eso muchas cosas tienen que dejarse al ámbito de la ley y no de la Constitución. Y, por tanto, pretender legislar a través de la Constitución es un error», reconoce.

LÍO DE PLATAS

También habla del lío de platas que enfrenta el gobierno: «Es una crisis muy grave de corrupción. Transparentar, que todo sea público, es el mejor antídoto contra la corrupción y contra el despilfarro de recursos. Segundo, creo que aquí hubo una organización o una coordinación para sacar en forma ilegal y corrupta recursos del Estado».

No cree en la tesis de la inexperiencia, acerca de que había cosas que las autoridades no sabían que se podían hacer, y se pregunta: ¿quién le entrega los recursos a una institución, una ONG recién creada, sin ninguna historia, y se los entrega en forma anticipada y sin ninguna garantía? Eso no es inexperiencia. Eso es corrupción o estupidez», remata.

Comparte en:

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp
Email

Comenta este artículo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

19 − 4 =