Internacional

Musulmanes califican de provocación ingreso de colonos judíos a la Explanada de las Mezquitas

Editado de agencias y medios internacionales por Cristian Navarro H.

Una visita a la Explanada de las Mezquitas en septiembre de 2000 por Ariel Sharon, entonces líder del partido Likud, fue el desencadenante de la Segunda Intifada.

Musulmanes califican de provocación ingreso de colonos judíos a la Explanada de las Mezquitas en Jerusalén

Un grupo de colonos judíos irrumpió en la Explanada de las Mezquitas en Jerusalén, específicamente en la mezquita de Al Aqsa, el tercer lugar más sagrado del islam, el martes 13 de agosto. Según el conteo de Waqf, la fundación religiosa administrada por Jordania, alrededor de 1.400 colonos ingresaron al lugar esa mañana.

Algunos de los colonos portaban banderas de Israel y realizaron oraciones en el sitio, algo altamente inusual. Desde que Israel ocupó Jerusalén Este en 1967, donde se encuentra la Explanada, el lugar ha estado reservado exclusivamente para el culto musulmán, permitiendo la entrada de judíos solo como visitantes, sin derecho a rezar.

Aprovechando la festividad judía de Tisha B’av, que recuerda una serie de tragedias para el pueblo judío, los colonos avanzaron por la explanada entre cánticos y gritos provocadores. Para los judíos, este lugar es conocido como el Monte del Templo, donde se cree que se erigió el Segundo Templo, considerado el sitio más sagrado del judaísmo.

Los colonos entraron a la explanada escoltados por la Policía y en grupos organizados de 100 personas, aunque, debido a las tensiones, finalmente entraron en grupos de 50.

Ministro de seguridad estuvo presente en el ingreso

El ministro israelí de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, estuvo presente durante la incursión. Es la tercera vez que visita este lugar sagrado, defendiendo el derecho de los judíos a orar allí. En un mensaje compartido en X, Ben-Gvir afirmó: «Hemos logrado avances significativos en la soberanía de Israel aquí. Nuestra política es permitir la oración judía».

La incursión provocó reacciones inmediatas. Nabil Abu Rudaineh, portavoz de la Presidencia palestina, exigió la intervención inmediata de la Administración estadounidense para frenar lo que calificó como provocaciones contra los lugares sagrados.

Gobierno de Netanyahu se desmarca de la acción

Por su parte, la oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, emitió un comunicado en el que se desmarcaba de la acción. «El evento de esta mañana en el Monte del Templo es una excepción del statu quo», se lee en el texto, insistiendo en que la política israelí sobre el lugar sagrado «no ha cambiado» y que no existe una «política privada» de Ben-Gvir, ya que la legislación sobre el lugar depende del Gobierno y su liderazgo.

Es importante recordar que una visita a la Explanada de las Mezquitas en septiembre de 2000 por Ariel Sharon, entonces líder del partido Likud, fue el desencadenante de la Segunda Intifada.

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