En el frente de batalla más sangriento entre Rusia y Ucrania, es común encontrar a reclutas ebrios, soldados insubordinados y convictos de diversos crímenes. Estos individuos no son civiles inocentes ni fugitivos; se les conoce como los «malos militares» recluidos en las unidades penales rusas llamadas «Storm-Z». Según las fuentes consultadas por Reuters, pocos de ellos logran sobrevivir para contar su historia.
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El desprecio hacia los «Storm-Z»
Un soldado regular de la unidad 40318 del ejército, desplegada cerca de la disputada ciudad de Bajmut, en el este de Ucrania, en mayo y junio, declaró: “Los combatientes de las tropas de asalto no son más que carne”.
Este soldado afirmó que proporcionó atención médica a algunos de estos combatientes en el campo de batalla, desobedeciendo una orden de su comandante.
Los oficiales rusos evitan hacer comentarios sobre los Storm-Z, y el Kremlin redirige las preguntas al Ministerio de Defensa, que se niega a responder. Los medios de comunicación estatales rusos han informado sobre la existencia de los escuadrones Storm-Z y su participación en intensas batallas, pero no revelan detalles sobre cómo se forman o cuántas bajas han sufrido.
😮😨🔥A chilling development as Putin deploys ‘Storm-Z’ squads to the frontlines, reminiscent of darker times in history. Concerns grow. #Russia #Military #History 🇷🇺🚫🕊️ pic.twitter.com/RfUYNhSl3f
— Iris (@Iris_i_Life) October 3, 2023
Los escuadrones Storm-Z, cada uno con entre 100 y 150 efectivos, son desplegados en las zonas más peligrosas del frente contra Ucrania y experimentan pérdidas significativas. Algunos de sus miembros son convictos que se ofrecen como voluntarios a cambio de un indulto que a menudo no se materializa.
Estos escuadrones son utilizados por el Ministerio de Defensa ruso como infantería prescindible en el conflicto, según el Conflict Intelligence Team, una organización independiente que sigue la guerra. A diferencia de los mercenarios de Wagner, los escuadrones Storm-Z están bajo el mando directo del Ministerio de Defensa.
Reclutados desde prisiones
A pesar de la falta de detalles sobre su número exacto, se pueden comparar con los aproximadamente 25,000 combatientes de Wagner, que anteriormente estaban liderados por Yevgeny Prigozhin. Storm-Z es un término no oficial que combina «tropas de asalto» con la letra Z, símbolo de la invasión rusa de Ucrania.
Algunos de los combatientes, como Artyom Shchikin, un exrecluso reclutado por el Ministerio de Defensa ruso, se unen a los Storm-Z para limpiar sus antecedentes penales y ganar dinero. Aunque se les promete un salario, a menudo no reciben la totalidad de lo prometido.
Rebeldía en los Storm-Z
Un grupo de combatientes se negó a regresar al frente debido a las terribles condiciones. Publicaron un video denunciando la falta de suministros y órdenes incomprensibles. Después de la publicación, la policía militar los golpeó como castigo, aunque las autoridades rusas no han comentado públicamente sobre el incidente.
La situación de los Storm-Z sigue siendo incierta, y las familias de los combatientes mantienen la esperanza de que esta guerra llegue a su fin.
